¡Qué nervios! Resulta que sin casi darnos ni cuenta mañana empieza el draft de la NFL y yo la verdad es que no podría estar más nervioso. No lo voy a negar, es probablemente el segundo día que más me gusta de toda la temporada de la NFL por detrás de la Superbowl, así que comprenderéis mi alegría prácticamente desmedida. Muchos han sido los entretenimientos que nos han llevado hasta este día: análisis y rankings de los jugadores que se presentan al draft, análisis de las necesidades de cada equipo, elaboración de mock drafts y muchas más cosas; un trabajo acojonante que, en el fondo, para lo único que sirve es para llegar preparados a estos días. Porque en el fondo todo se reduce a esto, todo se reduce a saber si los jugadores de NCAA que irán eligiendo los distintos equipos les van a ser útiles en un futuro o no, todo se reduce a conocer al máximo lo que va a acontecer en el Radio City Hall de Nueva York durante los próximos días. En este sentido me gustaría barrer un poco para casa y recomendaros la página MockAll, un proyecto en el que he tenido la suerte de trabajar y que en la que creo que se ha hecho (y se sigue haciendo) un enorme trabajo en la cobertura de este próximo draft.
Sé que era tradición que por estas fechas escribiera la Carnicería con mi propio Mock Draft pero resulta que mis predicciones ya están escritas precisamente en MockAll (aquí tenéis mi Mock Draft personal), y creo que todos vosotros os debo bastante más que un simple corta-pega. Así que lo que voy a hacer a continuación es jugar a ser un poco astrólogo aficionado así que si me lo permitís voy a ponerme una capa con estrellitas de papel de aluminio, voy a tirar unas cartas que acabo de hacer con cuatro cartulinas de colores y dos bolígrafos y voy a intentar predecir algunas de las cosas que sucederán durante los próximos días.
Ojo peligro, este es de los artículos especialmente susceptibles a cagadas como templos que luego se me podrán echar en cara; me da igual, voy a hacer el artículo igualmente aunque pierda credibilidad. Primero porque es divertido jugar a ser adivino y segundo porque, en el fondo, tampoco tenía mucha credibilidad de antes. Así pues, procedo a tirar las cartas…
Carta del bostezo
Esta carta es bastante explícita, significa que nos va a costar no dormirnos. Y es que para qué vamos a engañar a nadie, el draft es un coñazo. Nos interesará más o menos, le daremos más o menos importancia y podremos juzgar los picks con más o menos criterio, pero lo que es la ceremonia en sí es un tostón de los que hacen época. Y especialmente en este nuevo formato. El draft dicen que empezará el jueves a las 20:00 eastern time, lo que al cambio son las dos de la madrugada del jueves al viernes, pero todos sabemos que al menos se alargará un cuarto de hora porque saldrá Goodell a recibir los ya clásicos abucheos y a hacer un discurso que importa a más bien pocos. Y cuando finalmente acabe dando inicio al draft, los equipos tendrán 10 minutos para hacer su pick. ¡¡10 MINUTOS!! ¿Para qué les están dando tanto tiempo para hacer un pick que tendrían que tener decidido desde hace semanas? Sí, para hacer trades, la teoría ya la sé, pero han tenido mucho tiempo como para explorar según qué situaciones, ¿en serio los equipos necesitan 10 minutos para solucionar su existencia corriendo a última hora habiendo tenido tanto tiempo para buscar planes alternativos? Porque es que lo peor es que los muy cansinos usan casi siempre los 10 minutos enteros, aunque ni tan siquiera tengan intención de hacer algún trade, parece que lo hagan simplemente por divertirse o por cerciorarse de que no hay ningún primo con ganas de aceptar un timo. ¿Y nosotros qué? Nosotros estamos en nuestras horas de dormir y estamos dispuestos a sacrificarlas, pero podrían tener un gesto hacia nosotros y agilizar un poco el proceso. Y es que no quiero desanimar a nadie pero ahí van unas matemáticas simples pero bastante elocuentes. Si son 32 picks a 10 minutos por pick da un total de 320 minutos, que al cambio son 5 horas y 20 minutos, o sea que si todo el mundo agota su tiempo y contando que el discursillo de Goodell dure 10 minutos (algo un tanto optimista) la primera ronda acabaría a las 7:30 de la mañana. No, no me he colado, podéis sumarlo y comprobarlo si queréis. Pero eso no es todo, también puedo deciros que a este ritmo tendremos el pick 10 aproximadamente a las 4 menos cuarto, o que llegaremos al pick 20 sobre las 5 y media. Visto así, quedarse despierto parece más una tortura china que algo que realmente nos apetezca, pero el draft es algo único y no me lo perdería por nada del mundo. Me aburriré como una ostra, bostezaré hasta y probablemente me quedaré frito a ratos, pero habrá merecido la pena.
Carta del señor vendiendo cabras
Creo que esta carta también bastante explícita, significa que hay mucha gente que querrá vender sus picks y bajar en el draft. Ojo, que esto no significa que vaya a haber muchos trades, básicamente porque puede que no haya muchos equipos interesados en comprar, pero sin duda hay muchos equipos con intención de bajar. El mayor exponente de esta situación son los propios Kansas City Chiefs, que creo que no podrían ser más felices si consiguieran colocar su pick #1 a cualquiera y conseguir picks extras para cubrir sus necesidades, pero está cantado que ellos no lo venderán, básicamente porque las tablas de mercado implican dar muchísimo a cambio de ese pick, y en este draft no hay ningún jugador por el que merezca la pena pagar un precio tan alto. Este está claro que no pasará, pero sí quiero comentar algunos escenarios de trade algo más plausibles:
– Equipos subiendo al top 5 a buscar un tackle ofensivo
Los tackles son un bien muy preciado en esta liga, y esto no sólo hace que sean drafteados mucho más arriba de lo que por talento les correspondería sino que además hace que la gente pierda el culo por llevarse a uno de los que creen que realmente vale la pena. Parece extrañamente sospechoso el repentino interés de los Jacksonville Jaguars por un tackle teniendo en cuenta que no es para nada una de sus principales necesidades, la situación apesta a la idea de bajar no mucho pero conseguir picks extras en el proceso, y creando miedo en otros equipos realmente pueden conseguir su objetivo. Algo parecido pasa con Oakland, que no es que hayan expresado un interés explícito, pero seguro que recibirían un trade de estas características con los brazos abiertos. Detroit ha perdido a Jeff Backus, Arizona necesita urgentemente ayuda en la línia de ataque y, ya más lejos, tanto San Diego como Miami (que por cierto tiene dos segundas rondas) seguro que también estarán interesados en este posible trade. Así pues, que a nadie le extrañe si se produce un trade de estas características ente estos equipos, un trade totalmente fruto del miedo porque ni Jaguars ni Raiders deberían escoger un tackle en sus picks, pero el draft no es sólo elegir a los mejores jugadores sino explotar también la faceta psicológica del evento para obtener el mayor beneficio para el equipo.
– Equipos de la parte baja subiendo al top 20
Se trata de equipos que piensan que sólo les falta una pieza para acabar de redondear su equipo, equipos que darán el oro y el moro por ese jugador concreto que llevaría a su equipo al siguiente nivel. Se habla de que los Atlanta Falcons podrían subir a buscar a Dee Milliner (si se confirman los rumores de sus problemas en el hombro) o a por un pass-rusher de nivel. Y también se habla, y esos serían mis favoritos para entrar en acción, de unos San Francisco 49ers que tienen un montón de picks y que parece ser que estarían muy interesados en subir a por Kenny Vaccaro. Y es cierto que para que alguien compre hay otro que tiene que vender, pero eso no va a suponer un problema, el draft estará lleno de equipos en el rango 10-20 que estarán encantados de bajar. Unos de los que se frotan las manos con este panorama son los New York Jets, quienes ahora tienen el pick #13, y que después de haber elegido a su jugador estrella en el pick #9 seguro que estarían encantados de obtener rondas adicionales para cubrir sus múltiples necesidades.
– Equipos que compran picks de la parte baja de la primera ronda
Son equipos malos con muchas necesidades, dispuestos a sacrificar picks o drafts futuros por un jugador que según su criterio está cayendo más de lo que debería. Y hay un vendedor claro. Sí, ese señor con las mangas del chaleco cortadas que tiene tendencia a amasar picks de draft como si se estuviera preparando para un holocausto nuclear. Y es que los New England Patriots tienen un total de 5 picks durante las 7 rondas que dura el próximo draft. Ni de coña se quedan con eso. Belichick y compañía necesitan bajar de esa posición para obtener más elecciones y no creo que haya pocos candidatos a subir a por ella. También atentos pueden estar otros equipos como los Vikings (con el pick #23 y el #25) o los Packers (una de las franquícias más conservadoras de la NFL), lo que hace muy posible que haya varios equipos que busquen ese segundo pick en la parte baja de la primera ronda. EJ Manuel parece ser un jugador que interesa bastante en este rango en el que nos movemos y parece ser que tanto Philadelphia como Buffalo podrían estar interesados en subir a buscarle, puede ser que Cincinnati se quiera asegurar la carta de Eddie Lacy y suba a buscarle con sus dos segundas rondas (o almenos una de ellas y otros picks adicionales) o simplemente puede haber algún jugador que esté cayendo mucho y que haya otro equipo que se anime a subir para conseguirle. En fin, posiblemente esta parte baja de la primera ronda es donde más trades habrá, y menos mal porque a esas alturas la retransmisión ya se nos estará haciendo muy pesada.
Carta del actor secundario Bob
Es de todos sabido que en los drafts las superestrellas se llevan la gloria pero que hay un montón de jugadores aparentemente desconocidos que, pese a no ser elegidos en las primeras posiciones, acaban siendo jugadores importantes para sus equipos. La carta del actor secundario Bob nos dice que este puede ser el año en el que más «actores secundarios» puedan acabar convirtiéndose en protagonistas. Y es que este no es un buen año para las superestrellas, es más bien un año en el que hay muchos jugadores a los que se le supone mucho potencial y hay mucha profundidad en la mayoría de posiciones (especialmente las defensivas). Es por eso que este año habrá que prestar mucha atención a las rondas medias (de la segunda a la cuarta), porque creo que serán tan (o incluso más) importantes que la primera; quizá no sea el mejor draft para vender ilusión a una afición deprimida con un prospecto extraordinario pero, si se sabe aprovechar, va a ser un draft en el que un equipo pueda sentar las bases para una reconstrucción o solidificar su roster con muchas adiciones realmente útiles. Y es precisamente por eso que la primera ronda de este año puede dar lugar a muchas sorpresas, es muy posible que nos caguemos en todo lo que se mueve después de alguno de los picks hasta el punto de que los vecinos bajarán en pijama y zapatillas a ver si pasa algo, pero en el fondo esos picks serán algo perfectamente normal. Estoy convencido que muchos equipos apostarán por escoger al mejor jugador disponible en su ranking particular independientemente de sus necesidades, básicamente porque saben que podrán cubrir esas necesidades en rondas posteriores con jugadores igualmente válidos, lo que va a dar pie a picks aparentemente incomprensibles. Y un último detalle que nos ilustra perfectamente la importancia que pueden tener los actores secundarios durante este draft por encima de los teóricamente protagonistas. A principios de temporada Johnthan Banks era uno de los cornerbacks mejor considerados para este draft pero con el paso del tiempo, al mirar partidos de Banks para conocer su evolución, la gente se ha dado cuenta de que el otro cornerback del equipo, Darius Slay, también lo hacía bastante bien. Este jueves, en el green room (la sala habilitada para que ciertos prospectos puedan seguir el draft en directo y aparecer a saludar al comisionado cuando se les elija) Darius Slay estará presente y Johnthan Banks no. En este caso Robin ya es mejor que Batman, un presagio de lo que puede pasar en un futuro no demasiado lejano.
Carta del reloj de arena
Esta carta significa que se me está acabando la conexión mística que estoy teniendo con estas cartas con lo que mis poderes de predicción se están acabando (si es que había tenido alguno en algún momento). Así pues, aprovecho estos últimos momentos para hacer una ronda de predicciones rápidas:
– Los Bengals serán el equipo que saldrá más reforzado de este draft. Son un equipo que normalmente acierta con los picks, con pocas necesidades y con tres picks en las dos primeras rondas seguro que es capaz de añadir esas piezas concretas que les haga pasar de ser un equipo de wildcard a ser un equipo realmente aspirante a todo.
– Se está hablando de que la clase de quarterbacks es la más floja de los últimos años y que es posible que no salga ninguno en primera ronda. Ni de coña. Los quarterbacks son un bien demasiado preciado en esta liga y hay demasiados equipos que necesitan uno. No serán picks demasiado acertados porque realmente no son prospectos de primera ronda, pero al menos tres quarterbacks serán elegidos en primera ronda en este draft.
– Hablando de bienes preciados, hay tres tackles ofensivos proyectados por encima del resto (Joeckel, Fisher y Johnson), ninguno de ellos estará disponible en el pick 8. Y además, al menos dos más serán elegidos en lo que queda de primera ronda. Probablemente tampoco lo merecen, pero es lo que tiene el valor posicional.
– Dee Milliner será el jugador que más caiga en el draft. Parece que los equipos están muy preocupados con la recuperación de su hombro y no están dispuestos a arriesgar demasiado con él. Del posible estatus de top 5, Milliner tendrá suerte si le eligen dentro del top 15.
– Como contrapunto, Tank Carradine será la mayor sorpresa del draft. Un jugador que hasta hace poco estaba totalmente fuera de primera ronda no es descartable que salga dentro del top 10. Para el 20 ya habrá sido elegido sin ningún tipo de duda.
– Tyrann Mathieu, el nombre de moda. Mucha gente desconfía de él por su pasado oscuro pero hay demasiado talento ahí como para que todo el mundo pase de él. Recordad, sólo hace falta que un equipo confíe en un jugador para que salga más arriba de lo que todos pensamos. Antes del final de la segunda ronda ya habrá alguien que haya apostado por Mathieu.
Pues nada, me he quedado sin nada más que decir, mis poderes de predicción tienen unos límites así que mejor cierro aquí antes de que patine aún más, simplemente pido que si la cago mucho tampoco me lo tengáis mucho en cuenta. Total, que ahora lo único que nos queda es sentarnos, cargarnos de cafeína para no quedarnos sobados y disfrutar del draft, que en el fondo esto sólo pasa una vez al año. Y a partir del domingo, empezar a alabar a ciertos equipos y a cagarnos en otros tantos por sus decisiones. Porque la gracia del draft, además de todos los análisis previos y de lo que vendría ser el evento en sí, también son los análisis posteriores, y os aseguro que este año va a haber mucha tela que cortar.