Bienvenidos a otra entrega de este cuarteto de artículos en los que repasamos el draft de 2010 desde la perspectiva que dan tres años. Sé que en el anterior capítulo dije que próximamente veríamos al que probablemente es el peor draft de la década, siento deciros que eso no será hoy, será la semana que viene. De momento habrá que conformarse con el análisis de las divisiones Este y Norte de la Conferencia Nacional. Con lo cual, sin nada más que decir, procedamos a ver qué tal le hicieron esos equipos durante el draft de hace tres años.
NFC East
Dallas Cowboys
Ronda 1, Pick 24 (24): Dez Bryant (WR, Oklahoma State)
Ronda 2, Pick 23 (55): Sean Lee (LB, Penn State)
Ronda 4, Pick 21 (119): Akwasi Owusu-Ansah (S, Indiana PA)
Ronda 6, Pick 10 (179): Sam Young (OT, Notre Dame)
Ronda 6, Pick 27 (196): Jamar Wall (CB, Texas Tech)
Ronda 7, Pick 27 (234): Sean Lissemore (DE, William & Mary)
Draft moderadamente agresivo de los Cowboys que sin duda les ha dado buena parte de los resultados esperados. Subieron tanto en primera como en segunda ronda para conseguir a los jugadores que querían y, aunque sacrificaron quizá demasiados picks intermedios, es innegable que el rendimiento de sus elecciones justifica de sobras esos dos trades. En primera ronda Dallas subió tres puestos para hacerse con Dez Bryant y, después de un par de años de rendimiento por debajo de lo esperado, esta temporada ha servido para convertirle por fin en uno de los diez mejores receptores de la liga; el trade mereció totalmente la pena y su estatus de primera ronda ya ha quedado más justificado, y eso es sólo el principio de su carrera. En segunda pasó algo muy parecido, Dallas subió cuatro puestos para asegurarse los servicios de Sean Lee, un linebacker que hasta el momento ha rendido a las mil maravillas y que, aunque quizá vea afectado su rendimiento debido al reciente cambio de sistema defensivo de los Cowboys, de momento ha sido un pick excepcional. Del resto de jugadores destaca Sean Lissemore, que inicia la temporada como unos de los defensive tackles de rotación pero que la temporada pasada jugó como defensive end titular durante parte del año, teniendo en cuenta la ronda en la que fue elegido es un pick con ciertamente mucho valor. Del resto de jugadores ya no queda ninguno en plantilla, quizá destacando el pequeño fracaso de Owusu-Ansah, un jugador que parecía que iba a ser el retornador principal del equipo pero que apenas duró un año en la plantilla activa de los Cowboys. Pero en ningún caso este pequeño desliz empaña un draft en el que consiguieron dos grandes estrellas (una por lado del balón), algo que sin duda no se consigue todos los días.
New York Giants
Ronda 1, Pick 15 (15): Jason Pierre-Paul (DE, South Florida)
Ronda 2, Pick 14 (46): Linval Joseph (DT, East Carolina)
Ronda 3, Pick 12 (76): Chad Jones (S, LSU)
Ronda 4, Pick 17 (115): Phillip Dillard (LB, Nebraska)
Ronda 5, Pick 16 (147): Mitch Petrus (OG, Arkansas)
Ronda 6, Pick 15 (184): Adrian Tracy (DE, William & Mary)
Ronda 7, Pick 14 (221): Matt Dodge (P, East Carolina)
No hay duda de que cuando un equipo consigue un crack como Jason Pierre-Paul el draft tiene que calificarse como mínimo de decente, pero creo que es la calificación máxima que se le puede dar a este grupo de jugadores elegidos. JPP fue una elección arriesgada, era un jugador sin mucha producción a nivel de college pero con mucho potencial y, aunque los inicios no fueron fáciles, con el tiempo el pick de Pierre-Paul se ha convertido probablemente uno de los mejores de todo el draft. De todas formas, ahora mismo les estoy dando un poco el beneficio de la duda pero si los Giants quieren que este pick se valore como es debido, Pierre-Paul deberá volver al nivel de 2011 y no quedarse en la pobre producción de esta temporada. El resto del draft cuenta con Linval Joseph como jugador importante, un defensive tackle que ha alternado rotación y titularidades pero que deberá elevar su nivel de juego este año después de la marcha de Chris Canty, y con Adrian Tracy como jugador menor que aún conserva un puesto en la plantilla; el resto de jugadores ya no están en el equipo, lo que resulta en una relación algo baja entre número de picks y rendimiento dado al equipo. Especialmente destacar dos casos opuestos. Primero el de Chad Jones, un safety bastante prometedor al que un accidente de coche le truncó no solo su temporada de rookie sino probablemente su carrera deportiva entera, no hay nada que achacar a los Giants aquí puesto que fue mala suerte y nada más. Y segundo el de Matt Dodge, un jugador que estaba destinado a ser el punter del equipo para muchos años hasta que Tom Coughlin le abroncó públicamente después de un touchdown de retorno de punt de DeSean Jackson probablemente dejando su moral por los suelos, el equipo lo acabaría cortando antes de empezar la temporada siguiente; en este caso Coughlin se cargó el pick de una forma escandalosa. Pero todo esto en lo que refiere al draft en sí, pero para juzgar el draft de los Giants al completo hay una última consideración que hacer: los Giants firmaron a un tal Victor Cruz como rookie free agent. Borrad todo lo que he dicho al principio, el draft de los Giants fue tirando a bastante bueno…
Philadelphia Eagles
Ronda 1, Pick 13 (13): Brandon Graham (DE, Michigan)
Ronda 2, Pick 5 (37): Nate Allen (S, South Florida)
Ronda 3, Pick 22 (86): Daniel Te’o-Nesheim (DE, Washington)
Ronda 4, Pick 7 (105): Trevard Lindley (CB, Kentucky)
Ronda 4, Pick 23 (121): Keenan Clayton (LB, Oklahoma)
Ronda 4, Pick 24 (122): Mike Kafka (QB, Northwestern)
Ronda 4, Pick 27 (125): Clay Harbor (TE, Missouri State)
Ronda 5, Pick 3 (134): Ricky Sapp (DE, Clemson)
Ronda 5, Pick 28 (159): Riley Cooper (WR, Florida)
Ronda 6, Pick 31 (200): Charles Scott (RB, LSU)
Ronda 7, Pick 13 (220): Jamar Chaney (LB, Mississippi State)
Ronda 7, Pick 36 (243): Jeff Owens (DT, Georgia)
Ronda 7, Pick 37 (244): Kurt Coleman (S, Ohio State)
Tal y como ha demostrado Bill Belichick en numerosas ocasiones (como por ejemplo en el draft de 2009) tener muchos picks no es siempre garantía de éxito, y esto es exactamente lo que pasó con el draft de los Eagles en 2010. ¿Sabéis cuantos de todos estos jugadores está previsto que sean titulares esta próxima temporada? Pues efectivamente, ninguno. Mira que es complicado fallar tanto, pues en los Eagles lo han conseguido. Para empezar, subieron a por Brandon Graham en primera ronda (en un movimiento que a día de hoy se sigue sin entender demasiado) y entre lesiones y desaprovechamiento nunca rindió al nivel esperado hasta finales de la última temporada. Pues nada, cambio defensivo, se ficha a Connor Barwin y Graham se vuelve al banquillo. Gran aprovechamiento de los recursos, sí señor. Nate Allen y Kurt Coleman fueron la pareja de safeties titulares de los Eagles en 2012, pero ambos han sido reemplazados en esta agencia libre debido a su bajísimo rendimiento durante todo el año. Y así habría algunos jugadores más que participan de vez en cuando en el equipo e incluso han llegado a ser titulares en algún momento (Riley Cooper, Jamar Chaney) pero nada realmente relevante como para ayudar a mantener al equipo en lo más alto. ¿Me podéis recordar cómo ha quedado el equipo este año, tres temporadas después de este draft? Pues eso. Pese a que es necesario hacer algunos fichajes en agencia libre a modo de retoque, el draft es la base en la que se deben fundamentar los equipos para triunfar, y cuando se tiene un draft desastroso los malos resultados acaban saliendo por algún lado. Esperemos, por el bien de los Eagles, que en este próximo draft atinen más con sus elecciones.
Washington Redskins
Ronda 1, Pick 4 (4): Trent Williams (OT, Oklahoma)
Ronda 4, Pick 5 (103): Perry Riley (LB, LSU)
Ronda 6, Pick 5 (174): Dennis Morris (TE, Louisiana Tech)
Ronda 7, Pick 12 (219): Terrence Austin (WR, UCLA)
Ronda 7, Pick 22 (229): Erik Cook (C, New Mexico)
Ronda 7, Pick 24 (231): Selvish Capers (OG, West Virginia)
El draft de los Redskins, viendo las circunstancias, es mucho más apañado de lo que uno podría llegar a pensar. Trent Williams se ha convertido exactamente en el jugador que los Redskins esperaban que fuera, un tackle franquícia que ha manejado la posición a las mil maravillas hasta el momento y es probable que la siga manejando igual de bien durante los próximos años. Por otra parte, conseguir a Perry Riley en cuarta ronda es todo un logro, se ha convertido en un linebacker interior titular y podría acabar siendo el reemplazo de London Fletcher cuando éste termine su relación con los Redskins. Pero hasta ahí las buenas noticias. De los otros cuatro jugadores ninguno sigue en plantilla, aunque en defensa de los Redskins hay que decir que son todo selecciones de sexta ronda en adelante, pero lo realmente grave de este draft no es esto. Lo realmente grave es explicar porqué los Redskins no tenían ni segunda ni tercera ronda. La segunda ronda se la dieron a los Eagles a cambio de Donovan McNabb, un trade que dió un resultado horrible a Washington, mientras que la tercera ronda se la quitaron por haberla usado en el draft suplemental del año anterior para elegir a Jeremy Jarmon. ¿A que no sabéis ni de qué jugaba? Pues eso, que si hay que draftear algún jugador en el draft suplemental, hay que asegurarse de que merece la pena o, en caso contrario, usar una ronda mucho más baja, básicamente porque en caso contrario el draft del año siguiente puede quedar totalmente en cuadro.
NFC North
Chicago Bears
Ronda 3, Pick 11 (75): Major Wright (S, Florida)
Ronda 4, Pick 11 (109): Corey Wootton (DE, Northwestern)
Ronda 5, Pick 9 (140): Joshua Moore (CB, Kansas State)
Ronda 6, Pick 12 (181): Dan LeFevour (QB, Central Michigan)
Ronda 7, Pick 11 (218): J’Marcus Webb (OT, West Texas A&M)
Un poco como en el caso anterior, el draft de los Bears es bastante apañado teniendo en cuenta la falta de picks importantes (gastaron el primero en Jay Cutler y el segundo en Gaines Adams, aunque son casos totalmente distintos no tengo nada que objetar a ninguno de los dos trades). Major Wright ha ido escalando poco a poco posiciones en el depth chart hasta convertirse en el strong safety titular del equipo, siendo además un jugador que cumple bastante bien y con el que se cuenta para el futuro del equipo. Aunque no al mismo nivel, también es un pick muy correcto el de Corey Wootton, un jugador que también ha ido subiendo posiciones en el depth chart y está proyectado que empiece esta temporada como titular tras la marcha de Israel Idonije. Los picks de Joshua Moore y de Dan LeFevour no son nada buenos, especialmente este último puesto que es un jugador que se ha tenido que ir a buscar un puesto de trabajo a la liga canadiense, pero quien sí merece una mención especial es el último pick, y es que pese a ser drafteado en la séptima ronda, J’Marcus Webb ha sido este año uno de los tackles titulares de los Chicago Bears. Hasta aquí podríamos pensar que es un pick excepcional y que es el robo del draft, pero nada más lejos de la realidad. Es muy probable que J’Marcus Webb haya sido el peor tackle ofensivo de toda la NFL en este 2012 y su posición es una de las que los Bears necesita mejorar de forma más urgente según la opinión de buena parte de aficionados, así que en realidad el pick no ha resultado tan chollo porque no sólo ha jugado mal sino que además su mal rendimiento ha influido en un mal rendimiento de otros jugadores, y eso un equipo de la NFL no se lo puede permitir. Así pues, pese a que hay dos picks muy aprovechables, quizá la moraleja de este draft de los Bears es que el hecho de que un jugador elegido sea titular no significa que el pick sea bueno, y que no por forzar un jugador elegido en rondas bajas a ser titular la nota del draft va a mejorar (aunque en este caso, y siendo objetivos, la relación entre lo que ha sido Webb y el pick invertido en el es bastante razonable).
Detroit Lions
Ronda 1, Pick 2 (2): Ndamukong Suh (DT, Nebraska)
Ronda 1, Pick 30 (30): Jahvid Best (RB, California)
Ronda 3, Pick 2 (66): Amari Spievey (DT, Arizona)
Ronda 4, Pick 30 (128): Jason Fox (OT, Miami FL)
Ronda 7, Pick 6 (213): Willie Young (DE, NC State)
Ronda 7, Pick 48 (255): Tim Toone (WR, Weber State)
Aparentemente no fue un draft del todo malo, pero tampoco podemos calificarle de bueno. No hay dudas del pick de Ndamukong Suh, ni tan siquiera pensando que fue el segundo jugador elegido en todo el draft. Desde el primer día que pisó un campo de NFL, Suh ha sido un defensive tackle totalmente dominante, capaz de romper el pocket en cualquier jugada y un quebradero de cabeza constante para las líneas de ataque rivales. O sea, exactamente lo que se esperaba que fuera cuando se le drafteó. Lamentablemente, no podemos decir que tuvieran la misma suerte con el pick de Jahvid Best, ni mucho menos. Parecía que en Best los Lions encontraban al runningback que hacía ya demasiado tiempo que andaban buscando, y de hecho se quisieron asegurar de draftearle al subir otra vez al final de la primera ronda. Pero no salió bien. Los problemas de conmociones cerebrales de Best durante estos años (y de hecho también los que tuvo mientras estaba en college) han prácticamente terminado con su carrera, haciendo de él un pick extremadamente poco rentable para lo que se gastó en elegirle. Una lástima porque podría haber sido un grande, pero las cosas no fueron para nada como los Lions querían. A partir de ahí, un draft que deja bastante frío pero tampoco podemos decir que malo. Amari Spievey ha sido titular ocasionalmente y ha sido un buen jugador contra la carrera desde la secundaria, pero sus pocas habilidades de cobertura le han acabado llevando al banquillo. Y por otra parte, tanto Jason Fox como Willie Young siguen en el equipo pero con un rol bastante menor. Así pues, aunque suene un poco duro por las circunstancias, los Lions sólo han podido aprovechar realmente un jugador en todo el draft (y usando un pick con muy poco riesgo) con lo que no puede ser un buen draft a nivel global.
Green Bay Packers
Ronda 1, Pick 23 (23): Bryan Bulaga (OT, Iowa)
Ronda 2, Pick 24 (56): Mike Neal (DE, Purdue)
Ronda 3, Pick 7 (71): Morgan Burnett (S, Georgia Tech)
Ronda 5, Pick 23 (154): Andrew Quarless (TE, Penn State)
Ronda 5, Pick 38 (169): Marshall Newhouse (OT, TCU)
Ronda 6, Pick 24 (193): James Starks (RB, Buffalo)
Ronda 7, Pick 23 (230): CJ Wilson (DE, East Carolina)
A simple vista, un draft excepcional puesto que absolutamente todos los jugadores siguen en el roster de Green Bay, de los cuales tres han sido titulares indiscutibles a finales de 2012. Pero fijándonos en los detalles, fue un draft justito y gracias. Bryan Bulaga ha resultado un buen pick como tackle derecho pero no es la posición para que se le drafteó, este año parece que puede jugar como tackle izquierdo y no será hasta entonces que podré opinar objetivamente si éste fue un buen pick o no. Mike Neal es un jugador infravalorado, con más capacidad de pass-rush de la que aparentemente parece, pero tampoco es ningún superclase que haya demostrado ser un jugador de segunda ronda. El pick de Morgan Burnett es quizá el más consistente de todo el draft, pero parece que su año de rookie fue el mejor desde que está en los Packers (supongo que tener a Nick Collins al lado ayuda más que tener a Peprah), en cualquier caso debería evolucionar en su juego para que se le pueda considerar un buen pick con todas las letras. Y luego está Marshall Newhouse… bufff… Newhouse es un poco J’Marcus Webb, ha estado jugando de tackle izquierdo titular pero eso no le convierte en un buen pick ni por asomo, especialmente floja es su protección de pase y de ello se ha resentido mucho el juego de Rodgers. También merecen una mención Quarless y Starks, dos jugadores muy importantes durante el año en que los Packers ganaron las Superbowl (su primer año) pero que se han ido diluyendo, el primero por un tema de lesiones y el segundo porque ha sido incapaz de mantenerse como runningback principal (como cualquiera que haya intentado pasar por el puesto por otra parte). Por último, CJ Wilson es un jugador decente para entrar en rotación pero nada más. Resumiendo, siete jugadores aprovechables pero de los cuales de momento ninguno (y a largo plazo como mucho dos) que realmente marquen las diferencias. Desde luego, podría ser mejor.
Minnesota Vikings
Ronda 2, Pick 2 (34): Chris Cook (CB, Virginia)
Ronda 2, Pick 19 (51): Toby Gerhart (RB, Stanford)
Ronda 4, Pick 2 (100): Everson Griffen (DE, USC)
Ronda 5, Pick 30 (161): Chris DeGeare (OT, Wake Forest)
Ronda 5, Pick 36 (167): Nathan Triplett (LB, Minnesota)
Ronda 6, Pick 30 (199): Joe Webb (QB, UAB)
Ronda 7, Pick 7 (214): Mickey Shuler Jr. (TE, Penn State)
Ronda 7, Pick 30 (237): Ryan D’Imperio (LB, Rutgers)
El draft de los Vikings no es ninguna maravilla, por no decirlo de otra manera un poco más contundente. Sí, es cierto que han sacado a un titular (Cook) y dos suplentes (Griffen, Gerhart y Webb), pero realmente no hay demasiada calidad entre todos estos jugadores. El mejor pick del draft es probablemente Everson Griffen, un defensive end especializado en pass-rush que suele salir en downs de pase, que año a año va mejorando y que es muy posible que pronto le reclame el puesto de titular a Brian Robison. También Chris Cook es un pick decente, ha sido un cornerback cumplidor durante estos años pero nunca ha tenido que asumir un rol demasiado importante en el equipo, este año con la marcha de Antoine Winfield deberá tener más protagonismo y acabará de demostrar si es realmente un pick válido para los Vikings. Toby Gerhart es otro jugador que merece la pena comentar, en las pocas oportunidades que ha tenido ha demostrado ser un corredor muy válido pero cuando se tiene a Adrian Peterson por delante es muy difícil que un pick se rendibilice, con lo cual en el fondo el pick no es bueno, no por el jugador en sí sino por lo que realmente ha podido aportar al equipo. Y por último, el otro jugador destacable (porque el resto ya no forman parte de la plantilla) es Joe Webb, un quarterback con el que arriesgaron, que se hizo con el puesto de quarterback suplente desde el primer día, y que quien viera el último partido de playoffs de los Vikings contra los Packers podrá sacar sus propias conclusiones acerca de si es un pick que ha resultado útil a Minnesota o no. Con estas credenciales, y aunque es obvio que hay piezas que resultan de interés, globalmente los Vikings no pueden estar contentos con lo que eligieron hace tres años, por no decirlo de otra manera un poco más contundente otra vez.
Y no, aunque pueda parecer que un poco sí, éste último no es el draft que considero uno de los peores (sino el peor) de la última década, ya he dicho que éste venía en el artículo de la semana que viene. Si queréis saber la respuesta, con un poco de paciencia ya sabéis donde la encontraréis.