Hemos llegado a un punto en el que no sabemos que decir de Anderson Silva que no hayamos dicho ya. Sin duda, es el mejor del mundo actualmente y nos tendríamos que plantear si no ha superado ya a Fedor Emelianenko como el más grande en la historia de este deporte. La actuación del sábado ante Stephan Bonnar fue espectacular, no sorprendente pero sí lo suficientemente buena como para encumbrarlo aun mas.
El combate se podría resumir con dos momentos: cuando Anderson se dejaba golpear apoyado en la jaula y el instante en que Bonnar se retuerce de dolor tras sufrir el rodillazo al pecho que desencadenó el final del combate. Lo que hace Silva no es capaz de imitarlo nadie, es algo que deberán pasar muchos años para vivir algo parecido. Podemos parecer exagerados pero os remitimos a los 4 minutos y 40 segundos que duró Bonnar en pie. Silva se dejaba golpear una y otra vez, con las manos en la cintura y sin hacer el mínimo intento de protegerse. Esquivaba alguna patada como hubiese hecho el mismísimo Bruce Lee en alguna de sus películas y después seguía recibía puñetazos como si nada. Hasta que el brasileño se ve que se cansó de recibir leña y decidió cortar por lo sano, rodilla perfectamente colocada y Bonnar al suelo sin posibilidad de reacción, otra victoria para el campeón.
Ahora la duda es la siguiente: ¿debe Silva, de 37 años, seguir defendiendo su cinturón de campeón de peso medio, o dejar el título vacante y dedicarse los últimos años de su carrera a superpeleas ante St Pierre y Jon Jones? Nosotros apostamos claramente por la segunda opción. Anderson ya ha limpiado su división, ha derrotado a Sonnen en dos ocasiones y quitando a Weidman y Belcher no hay rivales de nivel. En cambio, verle pelear contra GSP o Jones sería no solo una forma de sacar millones de dolares en PPV y entradas, también probaría que el brasileño será recordado como el primer gran Dios de este deporte si se alzara con la victoria. Si nos guiamos por las palabras de Dana White, estos supercombates podrían tener lugar a mediados de 2013, y White es un hombre de palabra, esperemos que siga cumpliendo.
Otro de los ganadores de la noche fue Antonio Nogueira. Veterano de mil batallas, “Minotauro” se resiste a que le retiren y volvió a vencer ante sus paisanos sometiendo a Dave Herman en el 2º round. Físicamente se le nota cansado y es que la edad no pasa en vano, pero cuando entra al octógono Nogueira se transforma y se sobrepone a cualquier problema hasta llevarse la victoria. No es que Herman sea un Top-10 de los pesos pesados, pero si que es un luchador muy atlético y con gran físico. Aun así, el brasileño consiguió dominar y vencer al americano sin demasiados sobresaltos. Está claro que Nogueira no tiene opciones de pelear de nuevo por el título, sobretodo porque el campeón es su alumno Junior Dos Santos, pero aun le quedan un par de años en la élite para suerte de todos.
Y el último nombre que vamos a destacar es Jon Fitch. Hombre criticado hasta la saciedad y con motivo, parece que ha decidido dar un giro a su forma de pelear y buscar la finalización asumiendo mas riesgo. Se ganó el bonus por “Fight of the Night” y le bajó los humos a un Erick Silva muy crecido que no respetó a su rival. Esperemos que este sea el Fitch que vamos a ver en el futuro y no ese luchador aburrido que solo sabía “lay-and-pray”.
Ahora tenemos parón de varias semanas antes de la recta final de año con la vuelta de George St Pierre y el gran cartel de UFC on FOX.