Las semanas siguen pasando en Indiana y los Colts siguen sin ver la luz al final del túnel. La última derrota por 31-7 en Atlanta les ha colocado con un récord totalmente impredecible a principios de temporada: 0-9. Esto es un dato que no se espera para nada de un equipo que supuestamente debe luchar cada temporada por llegar a la Superbowl por historia, trayectoria de los últimos años y plantilla. Además, tras la primera victoria de los Miami Dolphins el pasado fin de semana, ya son el peor equipo por ahora de esta temporada al no haber ganado todavía un partido. Aún así, los partidos que han jugado los Colts en casa hasta ahora han sido bastante competitivos por su parte. Ellos se escudan en que sólo tienen que limar ciertos aspectos y detalles para que les salgan las cosas bien y que tienen que ser honestos con la situación para sacarla adelante.
Pero, ¿y si llegan a 0-16? ¿Es probable que se de esta situación? Su calendario restante invita a pensar que pueden pescar alguna victoria, sin ir más lejos en los dos próximos partidos contra los Jaguars y los Panthers (2-6 ambos actualmente). Más tarde tendrán que enfrentarse a los Patriots y por último a los Ravens, Titans, Texans y Jaguars de nuevo. Si no consiguen estrenar el casillero de victorias ante Jacksonville o Carolina, podemos estar ante una de las mayores debacles de la historia moderna de la NFL, ya que los partidos ante New England, Baltimore, Tennessee y Houston se presentan más complicados y con muchas menos posibilidades de poder ganar.
En condiciones normales y con el curso de la temporada esperado, los enfrentamientos contra los Patriots o los Ravens serían de lo más esperado por la calidad y la competitividad, pero dadas las circunstancias de este año, todo parece indicar que los Colts podrían acabar con un par de victorias como mucho esta temporada.