La guía esencial para seguir la temporada 2010 de college football.
El fútbol americano universitario es el tercer deporte más seguido en Estados Unidos detrás del fútbol americano profesional (NFL) y las Grandes Ligas de béisbol (MLB). La razón es básica, la mayoría de los estadounidenses pasan por la universidad para completar sus estudios por lo que crean un vínculo único con dicha organización. En los casos de gente que no tiene el privilegio de poder pagarse unos estudios de college, la tendencia hacia seguir el fútbol americano universitario se debe a la falta de equipos de la NFL en sus estados o áreas, por lo que el equipo universitario rellena ese vacío de mercado; Iwoa, Idaho, Nebraska, Oklahoma, son claro ejemplos. Caso aparte es Texas, el estado eminentemente «footballístico» de todos los de Estados Unidos, donde el football es una religión.
Por ello, el inicio de la temporada de la NCAA despierta una tremenda expectación. Hablamos de NCAA en la Division I de football, la más importante y la que se cubre mediáticamente con más profunidad. Existen otras divisiones. Estos últimos días os hemos ofrecido las previas de las diferentes conferencias. Para los que se inician mas o menos en este deporte decir que la Division I tiene seis conferencias BCS (Bowl Championship Series), Big Ten, Pac-10, Big East, SEC, Big 12 y ACC. Ello significa que, no solo están los mejores equipos con los programas de fooball donde se invierte más dinero y que reciben más dinero de las televisiones, sino también que tienen acceso directo a las bowls. Además hay otras cinco conferencias (WAC, MAC, MWC, Sun Belt y C-USA) más los independientes.
La explicación es la siguiente. Los campeones de las conferencias BCS (con balance 10-2 o mejor) tienen acceso directo a unas de las cinco bowls históricas (Fiesta, Sugar, Rose, Orange y el BCS Championship). Los dos primeros equipos en el ránking van al BCS Game, las otras cuatro bowls quedan para las otras conferencias con la excepción de la Big East que no tiene ese vínculo histórico. Notre Dame (que es independiente) también tiene derecho a esa clasificación automática por historia. Todo esto sin embargo está descartado oficialmente, se dice que las 11 conferencias son BCS, por lo que estamos hablando de términos generales utilizados por los medios de comunicación y los aficionados que, en la práctica, es verdad ya que los equipos non-BCS son infravalorados en los ránkings, algo que está empezando a cambiar.
Los tres meses de competición consisten en partidos de temporada regular con equipos de la propia conferencia más dos o tres con universidades de otras conferencias para hacer un total de 12 o 13, muchos de ellos anuales por viejas rivalidades. La finalización de la campaña regular llega en diciembre con algunas conferencias jugando un partido por el título de dicha conferencia (SEC por ejemplo) y otras que se decide por los balances de la temporada regular. A partir de ahí, llega la selección para las bowls, previamente establecida con un orden, de hecho, hay un nuevo calendario para los próximos tres años (2010-2013). Este año hay 35 bowls, y es un sistema que seguirá creando mucho debate ya que se compara con la organización de Playoffs del baloncesto universitario con una configuración más justa a través de eliminatorias.
Cuatro meses de competición con futuras esperanzas para la NFL, estadios de 70.000 personas con sold out, universitarios borrachos, regalos ilegales a jugadores, consumo de marihuana, pero lo más importante, mucho fútbol americano y de muy buena calidad.
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