Hace un par de años, Dallas se proclamó campeón de la NBA, y aunque entonces nadie contaba con ellos, lo cierto es que a día de hoy echando la vista atrás y, sobretodo viendo estos dos últimos años, aquel era un equipazo. La mala gestión del dueño y excéntrico Mark Cuban, que tenía entre ceja y ceja fichar a Deron Williams, ha hecho que el equipo se haya deteriorado de tal manera que ahora solo quedan dos jugadores de los que consiguieron ganare el anillo, Nowitzki y Marion.
Nowitzki ha sido siempre esencial en Dallas, sin él no suelen ganar, esa es parte de la culpa de que esta pasada campaña no entrasen en playoffs, se quedaron cerca pero todos los partidos que el genio alemán se perdió al principio de la temporada al lesionarse en Barcelona fueron la clave. Otro problema siempre ha sido tener un buen juego interior, con un center de referencia que pueda desatascarte un partido, en 2011 se tenía esa figura: Tyson Chandler, un muy buen pívot dominante bajo ambos tableros que fue clave en la consecución del anillo. En 2012 se fichó a Odom, no es un 5, y salió rana. El año pasado, no se fichó mal del todo, trajeron a Elton Brand, su mejor momento ya pasó, y a Chris Kaman, un buen 5 pero es más técnico que machacador. Con estos datos sobre la mesa, este año se ha fichado como center titular a Samuel Dalembert, que a sus 32 años debe ser el Chandler de la 2013/2014, aunque Rick Carlisle ya ha mencionado que no está en la mejor forma física posible. El juego iterior lo completan DeJuan Blair, que viene del eterno rival, San Antonio, Brandan Wright y Nowitzki.
El juego interior es clave en un equipo, que como en 2011 se antoja ser de tiradores, si en 2011 los `”shooters” eran: Jason Terry, J.J. Barea, Pedja Stojaklovic, Jason Kidd, Caron Butler, DeShawn Stevenson y como no Nowitzki, este año también hay buena camada de triplistas como son José Calderón, Monta Ellis, Devin Harris (lesionado), Wayne Ellington y Vince Carter sumados al alemán. Esto estos dos últimos años no era así, no había tiradores de calidad y alto acierto. Además, ahora tres de ellos son presumiblemente titulares, Nowitzki, Ellis y Calderón, además Carter tiene muchas papeletas para ser el Terry de la 2013/2014, es decir un sexto hombre que aporte muchos puntos siempre que salga.
También la dirección del juego ha estado en horas bajas este último año tras la marcha del veterano Jason Kidd a los Knicks, Kidd dejó un vacío de puntos y asistencias difícil de rellenar por cualquiera, Collison y Beaubois el año pasado fueron incapaces de dirigir al equipo en condiciones. Este año no será un problema, nuestro buen amigo Mark Cuban ha hecho uno de los mejores fichajes que podría haber hecho, se ha traído al español José Manuel Calderón, posiblemente el mejor base europeo de la liga, llega un gran director de juego, con las ideas muy claras y con muchos puntos bajo el brazo, un auténtico ‘playmaker’ que por todo lo que ha demostrado en Toronto, Detroit y España será el perfecto sucesor en Dallas del gran Jason Kidd.
Este es pues un año de ilusión en Dallas, la plantilla aun no está cerrada, tienen 15 jugadores, de los cuales posiblemente alguno sea cortado o salga vía traspaso, ya que un alero tripista le vendría al equipo como anillo al dedo, pero de aquí a finales de febrero hay tiempo de traerlo. No todas las franquicias pueden jactarse de tener a un dueño como Cuban, un grillado para muchos, un genio para otros, pero que es tan parte del alma de los Mavs como el propio Nowitzki. Gracias a él los jugadores quieren ir a Dallas, como dijo Calderón en una entrevista o directamente no se quieren ir, como es el caso de Nowitzki. Y es de agradecer un jefe así, dispuesto a hacer todos los esfuerzos posibles para que su equipo gane el segundo anillo, veremos si es este año, en el cual el equipo tiene muy buena pinta o por el contrario debe seguir desembolsando dinero para traer jugadores para ganar.