Después del séptimo partido ante San Antonio, intenté dejar unos días para poder hacer este artículo con la mayor serenidad posible.
En octubre comentaba en otro artículo lo ilusionante del proyecto de los Mavs este año, y no me equivocaba del todo. Sí, tenía una mínima esperanza de que ganasen el anillo, pero tampoco me ha desagradado la temporada en absoluto. Meterse en playoffs como octavo en la conferencia oeste no es moco de pavo, y dejando fuera a unos Suns que estaban muy fuertes, y para postre llevar al mejor equipo de la conferencia, San Antonio, hasta el séptimo partido, está muy clara la mejoría respecto al año pasado, en el que ni siquiera se logró la clasificación para la postemporada.
La gestión de los fichajes por parte de Cuban este año ha sido muy buena, ha traído jugadores importantes como Monta Ellis o José Calderón, que han rendido a un gran nivel, pero no todos los jugadores han tenido un rendimiento tan bueno, como Harris, Ellington o Crowder. Otro punto clave ha sido la pintura, donde este año se incorporó a Dalembert y a Blair, que han realizado un gran trabajo pero les ha faltado aportar más puntos en la pintura, que deben ser la base de todo gran equipo, así como el aspecto reboteador,donde no han estado muy acertados. Y hace mucha falta un buen base suplente, para que se note lo menos posible la ausencia de Calderón.
En el lado positivo tenemos a los de siempre: Nowitzki, Marion y Carter, los tres abuelos que siguen dando guerra y tirando de este equipo. A ellos este año se les han sumado Ellis y Calderón, lo que ha hecho dar un salto de calidad respecto al pasado año. Cabe indicar que desde que se proclamaron campeones, con un récord en temporada regular de 57-25, no habían tenido un año tan bueno como este, 49-33, y eso es un claro factor de que se está yendo por el buen camino, sobre todo en una conferencia tan pareja como la Oeste, en la que cualquiera puede ganarte al más mínimo descuido. Otro factor que nos señala la buena marcha de este proyecto es que es el octavo equipo que más puntos anota por encuentro. Por el contrario los factores que nos señalan las áreas que se deben mejorar son rebotes, donde son los cuartos que menos atrapan, y en puntos permitidos, donde son los décimos que más puntos permiten.
Así pues, Mark Cuban y Rick Carlisle deben ponerse desde ya a planificar con esmero la próxima temporada, puesto que el proyecto va encaminado hacia el éxito, pero solo si arreglan los puntos débiles del equipo, defensa y rebotes, un buen base suplente, sigo viendo la necesidad de un alero o un escolta triplista, y sobre todo mientras Nowitzki se mantenga sano y a un buen nivel como hasta ahora, y tanto Carter, Marion, Ellis y Calderón sigan a tope. Será interesante ver qué hace el bueno de Cuban este verano para armar un equipo potente a corto plazo, porque sabe que si quiere otro anillo tendrá que ser mientras le dure el alemán, y al alemán no le quedan muchos telediarios.