Al principio tuvo que pasar desapercibido para todo el mundo en la NBA. De ser una elección del montón del Draft de 2010, concretamente el tercer pick de la segunda ronda elegido por los Sacramento Kings, a ser olvidado e iniciar una travesía sin rumbo fijo por varios equipos de la NBDL. También por la liga de China e incluso la de Líbano. Recorriendo el mundo persiguiendo su sueño y allá donde le permitían practicar su deporte e intentar demostrar su valía.
Tuvo las narices bien puestas de reintentar su ingreso en la NBA. Y lo consiguió. Firmó con los Memphis Grizzlies a finales de septiembre de 2014, hizo el training camp con ellos pero antes de empezar la temporada decidieron cortarle. De nuevo a la liga de desarrollo. Un paso por varios equipos, mucha incertidumbre durante un mes, pero pronto acabó el trasiego de equipos y destinos de Hassan Whiteside. Justo cuando llegó un equipo con unas necesidades enormes por contratar a un jugador de sus características. Precisamente en el momento en el que estaban heridos y necesitaban crecer y rehacerse del abandono de su estrella más preciada cuatro meses atrás. Justo cuando aparecieron los Miami Heat y se fijaron en el talento por el que nadie había querido apostar en serio hasta ese momento.
Su juventud, trabajo, calidad, técnica y forma de juego están haciendo de Whiteside una figura imprescindible en el comienzo de campaña para los Miami Heat. Es importante en el esquema, puede desarrollar su talento cómodamente y los de Florida necesitan que crezca y coja aún más galones de los que ya está asumiendo en el equipo. Y toda esa constancia que ha tenido desde que fuera drafteado en 2010 hasta ahora, que es cuando está empezando a despuntar, es la que está permitiendo que Hassan esté en boca de muchos corrillos de la NBA.
Porque ya no sólo son sus números y ver cómo juega los partidos. Es el hecho de entender lo importante que es para todos sus compañeros a la hora de mover el balón y de encontrar situaciones favorables en ataque, aunque también en defensa. Dada su agilidad y su gran repertorio de movimientos en el poste, es un jugador ideal para generar un dos contra dos apoyándose en Goran Dragic. Por la atracción que genera en los defensores es perfecto para que jugadores como Dwyane Wade busquen un espacio para lanar desde fuera o buscar una penetración. Y por lo rápido que es con el balón es la figura clave para doblar balones en media distancia a Luol Deno o Chris Bosh o incluso combinarse con este último debajo del tablero.
Hassan Whiteside tiene la habilidad para poder producir por sí mismo y a la vez generar juego en sus compañeros. En la prensa y en los análisis que se han venido haciendo estos meses atrás se ha dicho que Miami es un aspirante al anillo o al menos a competírselo en el Este a los Cleveland Cavaliers. Para ello, los Heat deben montar un quinteto sólido que le respeten las lesiones, pues el año pasado fueron fatales para una franquicia que vio los Playoffs desde casa por primera vez en siete años. Pero con jugadores como Hassan estarán más cerca de conseguirlo, marcando una línea de juego determinada en el equipo a la que todos se puedan adaptar y donde todos le puedan encontrar.
Los números no engañan
Para nada. Se ajustan perfectamente a la realidad. Whiteside está haciendo la mejor temporada de su carrera hasta el momento. Ya se empezó a ver la temporada pasada. Erik Spoelstra le dio galones, minutos, confianza y lo aprovechó. Este verano ha trabajado bien y los resultados, evidentemente, se están viendo.
En estos momentos está registrando 14,7 puntos, 10,9 rebotes y prácticamente un 64% de acierto en tiros de campo de media por partido. Por no mencionar el promedio de 4 tapones por noche, líder indiscutible de su equipo y de toda la liga en este apartado. Son los mejores números de su corta trayectoria en la NBA y, como siga a este nivel, estará cerca de mejorarlos aún más.
Además, es capaz de rebotear y de dar una consistencia al equipo bajo el tablero que añoraba desde hacía muchos años. Esto permite, además, aumentar el abanico de posibilidades a segundas opciones para sus compañeros y también podría servir para que los Heat tuvieran más posesiones por partido. Este dato es bastante alarmante, porque son los segundos que menos tienen de toda la liga (95,5) sólo por delante de los Utah Jazz.
Pero lo interesante del tema de Whiteside viene al ver su contrato actual con el equipo de Pat Riley. Los Heat le firmaron el año pasado por dos campañas, con lo cual al final de esta temporada tendrá que hablar con los altos cargos de la franquicia para debatir sobre su futuro. Su salario para este año es de $981.348 dólares. No llega ni a un millón. Pero visto lo visto hasta el momento, muy mal haría Miami en no renovar a este jugador, sobre todo por el hecho de tener cubierta una posición que se le ha resistido a los Heat desde que jugaran en su día Shaquille O’Neal o Lamar Odom.
El jugador más indicado para esa posición sería Chris Bosh, pero el ex de Toronto Raptors no es un cinco puro y es un jugador más efectivo como un 4 abierto, aunque tenga habilidad y envergadura para moverse bajo el aro. Udonis Haslem es otro de los pívots del equipo, pero en los últimos años ha ido perdiendo un poco de peso y no es ni de lejos un jugador dominante bajo el aro ni un pívot de garantías para las aspiraciones de Miami.
¿Una estrella de la liga? ¿All-Star?
Pese a toda la ola de optimismo que se ha generado en torno a la figura de Whiteside, es conveniente mantener los pies en el suelo. Más allá del buen juego y las buenas maneras que ha mostrado, no sería acertado considerarle ya como una gran estrella de la liga o como un pívot de élite dentro de la NBA. Porque eso sería desvirtuar en gran medida el trabajo que hacen y llevan muchos años realizando jugadores como Marc Gasol, LaMarcus Aldridge, Andre Drummond o Tim Duncan, entre otros.
La posibilidad de jugar un All-Star, de todos modos, crecería este año un poco más que en cualquiera de los anteriores. Aún así, de momento parecería complicado que se metiera. La única opción sería si los entrenadores de la liga le eligen como reserva, pues como titular no se llevaría la gran parte de los votos. Pero lo más importante son los pasos que está dando para poder llegar a ese nivel, pues quizás no esté aún entre la élite de la NBA, pero sí que lo está en su equipo y entre sus compañeros, pues está siendo fundamental en el inicio de temporada de los Heat.
Para ese momento quizás haya que esperar un poco aún. Pero para verle crecer, disfrutar con su juego y con su evolución en la liga no. Lo tenemos prácticamente todas las noches en la cancha demostrando sus habilidades y su inteligencia en la pintura. Disfrutemos de un gran jugador, de un auténtico volcán en ebullición, que solamente está empezando a despegar en la mejor liga de baloncesto del mundo.