La temporada 2011/2012 de la NFL culminará este domingo en la Super Bowl XLVI con los Patriots y los Giants con las espadas en todo lo alto reeditando el mismo partido de hace 4 años. En enfrentamientos a un solo asalto como éste, muchos factores entran en juego para decantar el partido de un lado u otro. Estas son 5 de las muchas claves que determinarán qué franquicia conseguirá el cuarto anillo de su historia.
#1: Eli Manning vs Tom Brady
El duelo de los quarterbacks de los dos equipos será uno de los más mirados con lupa por todos los aficionados y analistas de la NFL. Puede ser clave quien tenga la mayor inspiración y frialdad en los momentos más tensos para dar fluidez a las jugadas de ataque o algún pase clave en los últimos momentos del partido. ¿Volveremos a vivir un final de infarto y sorpresa en esta Super Bowl? No sería nada de extrañar viendo lo que ya pasó en las dos finales de conferencia la semana pasada, con lo que ya pueden rezar los seguidores de New York y New England para que sus mariscales de campo tengan su día para poder decidir el encuentro si el partido llega a esos límites.
#2: Las defensas
Otro factor a tener en cuenta pueden ser la defensa de los dos conjuntos, ya que en estos playoffs hemos visto bastantes casos de ataques que se han visto bloqueados o sobrepasados por toparse con defensas como auténticos muros infranqueables, tanto en el juego aéreo como en el terrestre. Muchos ojos estarán pendientes en si Pierre-Paul y Umenyiora permitirán a Brady campar a sus anchas durante largos periodos de tiempo y pasar cómo y cuando se le antoje a Aaron Hernández y Rob Gronkowski. Si esto sucede, pintarán bastos para los Giants; si consiguen complicar la noche a Brady, aumentarán sus opciones considerablemente.
#3: Los Field Goals
Tan pequeños pueden ser los factores que pueden decidir una Super Bowl, que el triunfo se te puede quedar a unos pocos centímetros. Y sino que se lo digan a Billy Cundiff, que por el error que ya todos conocemos los Ravens tendrán que ver el partido por televisión. Lawrence Tynes, en cambio, sí que tuvo la puntería más afinada para decantar la final de la NFC del lado de los neoyorquinos. ¿Temblarán algunas piernas en el Lucas Oil Stadium a la hora de patear? ¿Decidirán el partido como ya sucediese en las finales de Conferencia? Jugarte toda la temporada en una simple patada puede dar la gloria o la mayor de las decepciones a cualquiera de los dos equipos el domingo en Indiana.
#4: Juego aéreo vs juego terrestre
Creo que la clave del partido estará más en el juego aéreo que en el terrestre. Aún así, los Patriots no han hecho mal esta temporada en el juego terrestre, y más teniendo en cuenta que Brady ha lanzado para más de 5.000 yardas esta temporada, con lo que podrán buscar avanzar terreno en este apartado. En el juego aéreo, los Pats también han demostrado ser un equipo regular, aunque en este partido deberán facilitarse quarterback y widerecievers las cosas en esta faceta ante unos Giants que les pueden complicar las jugadas por alto. Nueva York tendrá sus grandes bazas en las yardas que consigan acumular con los pases, todo ello relacionado de cualquier modo con la figura de Eli Manning. El de Louissiana ha firmado su mejor temporada en la NFL con 4.933 yardas de pase, 29 touchdowns y 16 intercepciones y llega con mucha más madurez y experiencia que en la Super Bowl XLII.
#5: ¿Hambre de revancha?
Por supuesto que sí. Los Patriots tienen cuentas pendientes con los Giants tras la dolorosa derrota en la última Super Bowl que se enfrentaron en Arizona en 2008 y que privó a New England de acabar con un inmaculado récord de 19-0. La rivalidad histórica Boston-Nueva York cargará de más tensión y alicientes a este partido, en donde tanto Giants como Patriots buscarán colocar su cuarto título de la Super Bowl en sus vitrinas.