Tercera cita de la temporada la celebrada este domingo en Las Vegas y primera y agónica victoria para Ford y para Penske de la mano de Brad Keselowski, que consiguió superar en la última vuelta de la carrera a un Dale Earnhardt Jr. que se quedó corto de combustible.
Tras dos circuitos atípicos como Daytona y Phoenix, la carrera de Las Vegas suponía la primera llegada al tipo de oval más común que los pilotos van a encontrarse a lo largo del calendario NASCAR. Debido a esto, había cierta curiosidad por saber si realmente, los equipos que se habían mostrado fuertes hasta ahora, seguirían siendo competitivos en un oval de media/alta velocidad de 1’5 millas.
Y el primer equipo en confirmar su buen estado de forma fue Penske, colocando a Joey Logano y Brad Keselowski 1º y 2º respectivamente en la clasificación del viernes.
La mañana del domingo amaneció soleada y despejada en el desierto (tras dos citas del calendario con lluvia era algo de agradecer) y nada más darse el banderazo verde, Joey Logano puso tierra de por medio, abriendo un pequeño hueco con el pelotón. Pronto, el 4 veces ganador en el circuito, Jimmie Johnson se colocó entré los primeros y en la vuelta 45, arrebató el liderato a Logano, tras salir primero del carril de boxes en una detención bajo bandera amarilla, causada por suciedad en pista.
A partir de ese momento la lucha por el primer puesto fue cosa del propio Johnson, del ídolo local Kyle Busch y de los dos ganadores de esta temporada, Kevin Harvick y Dale Earnhardt Jr. Mientras tanto, Keselowski quedaba ligeramente descolgado con problemas de manejo al tener un coche un poco suelto en curva. La carrera transcurrió sin incidentes, hasta que a falta de 74 vueltas, Harvick tuvo que volver a garajes cuando marchaba 2º, por culpa de un problema con el anclaje de su rueda delantera izquierda. Unas pocas vuelta más tarde, saltaba la sorpresa al ver al número 27 de Paul Menard colocarse líder tras un gran día conduciendo en posiciones de Top-10 de forma continuada.
Las paradas en pit bajo bandera de verde a partir de la vuelta 215 dejaron a un recuperado Keselowski como líder, pero con una parada para combustible todavía por hacer, si quería acabar la carrera. Y esa parada llegó en la vuelta 220, tras una bandera amarilla causada por suciedad en pista otra vez. Todos los líderes entraron menos Dale Jr. y Carl Edwards que decidieron no parar y jugarse el todo por el todo para conseguir la victoria.
En el reinicio, Dale Jr. consiguió abrir un hueco importante y a partir de ese momento la carrera fue una persecución entre él y el 2º clasificado, Brad Keselowski, que se deshizo de Edwards tras algunas vueltas de lucha.
En las últimas vueltas la tensión se cortaba con un cuchillo. Brad conseguía acercarse a Dale Jr. e incluso por un momento consiguió adelantarlo, pero Earnhardt le devolvía el adelantamiento para recuperar inmediatamente el liderato y poner el corazón de la ‘Jr Nation’ a mil por hora.
Y justo en la última vuelta, cuando parecía que Dale Jr. conseguiría su segunda victoria del año, el sediento motor del Chevy número 88 empezó a aflojar dejando el liderato en manos de un Keselowski, que solamente tuvo que acelerar hasta la meta para conseguir su primera victoria de la temporada. Una victoria, la número 11 de su carrera que además sería la 2ª del fin de semana tras ganar el sábado la carrera de Nationwide. De esta forma, Keselowski también se asegura su entrada en el Chase por el título a final de temporada.
El Top 10 final lo completaron Menard, Logano, Edwards, Johnson, Newman, Kahne, Gordon y Kenseth.
La próxima cita del campeonato, será el domingo 16 en la media milla más rápida del mundo, Bristol Motor Speedway.