22 días quedan para la Superbowl XLIV en South Florida y llega el turno de unos Playoffs divisionales que se presentan bastante inciertos en cuanto a pronósticos en la Conferencia Nacional y algo más claros en la AFC pero sin olvidarnos del clásico «jet lag» del first-round bye.
Dos ofensivas dinámicas, dos retaguardias estáticas
New Orleans Saints vs Arizona Cardinals. Se preveé que tanto Drew Brees como Kurt Warner distribuyan el juego a varios receptores en un posible choque de espectacular juego aéreo. Todo el mundo está a la espera de como los Saints reaccionan tras finalizar la temporada con tres derrotas consecutivas después de un 13-0 inicial, unido al temido descanso de primera ronda de postemporada que en los últimos años se ha cobrado víctimas en Playoffs después de buenas temporadas regulares. Además, la franquicia de Louisiana ostenta un récord de 2-6 por estas fechas claves del año.
Los Cardinals llegan tras la victoria moral en la prórroga en el partido de Wild Card ante Green Bay. Warner (que tiene un balance de 9-3 en postemporada) lanzó más touchdowns (5) que pases incompletos (4) en un duelo en el que los receptores Breaston y Doucet brillaron ante la ausencia por lesión de Anquan Boldin. Precisamente este último es duda de cara al partido en el Superdome y «será una decisión de última hora«, ha comentado el head coach de Arizona, Ken Whisenhunt. Una de las claves del choque puede estar en la ayuda del juego de carrera a los habituales bombardeos de ambos quarterbacks. El RB rookie de los Cardinals Beanie Wells, que promedió 6,5 yardas por carrera el domingo pasado y viene de un final de temporada explosivo, se enfrenta a una defensa con graves problemas contra el juego terrestre en la racha de tres partidos consecutivos con derrota.
Las retaguardias de ambos equipos son flojas contra el pase (26º y 23º respectivamente), por lo que Warner y especialmente Brees que ha acumulado un 70,6% de los pases completados en temporada regular, pueden darse una atracón de yardas. Buenas noticias para los locales con la vuelta de Greer y Porter a la secundaria, en lo que el analista de ESPN Pat Yasinskas supone «el factor X dentro de la defensa de los Saints porque está al 100% tras su lesión«. De la capacidad de hacer big plays de cada una de las franquicias al comienzo del partido puede depender el devenir del duelo.
El gran partido: Vikings vs Cowboys.
Tremenda batalla se espera en Mineápolis entre dos equipos de similares características. Es la séptima vez en la historia que se enfrentan en Playoffs Vikings y Cowboys con la franquicia tejana habiendo roto una racha de trece años sin ganar en postemporada. Para el apartado de curiosidades quedan las conexiones sentimentales de varios jugadores: Tony Romo creció en Wisconsin admirando al Brett Favre de Green Bay Packers, Marion Barber es natural de Plymouth y jugaba en el Metrodome como miembro de la Universidad de Minnesota, y Adrian Peterson nació en Texas y era fan de los Cowboys.
Línea por línea el choque será tremendamente igualado. Dos quarterbacks en forma que han hecho las mejores campañas estadísticamente de su carrera con pocas intercepciones. Dos líneas ofensivas duras y capaz de proteger a su mariscal con ferocidad, aunque como dice el ex-jugador Troy Aikman, «no es sólo cuestión de las líneas ofensivas sino que ambos pasadores sepan cuando tienen que lanzar. El que haga menos pases bajo presión se llevará la gloria«. Favre ha declarado durante la semana que cree en sus posibilidades pese que muchos estén esperando a que falle: «estoy tomando mejores decisiones«.
El juego terrestre da como favorito al equipo visitante. Los Cowboys promedian 157,5 yardas por partido en esta faceta en las últimas cuatro victorias consecutivas. El joven Felix Jones viene de un partido de 148 yardas en la Wild Card y cargará todo el peso de correr la bola debido a la lesión de Marion Barber (listado como probable) ante la segunda mejor defensa contra la carrera de la NFL. Los Vikings deben recuperar el martillo de Adrian Peterson por el suelo si quieren balancear el ataque y no depender demasiado de los lanzamientos de Favre bajo presión, aunque el equipo norteño no ha anotado menos de veintisiete puntos en los ocho partidos de temporada regular que ha ganado en casa.
Las dos defensas rondan los mismos números en el pass rush. Dallas cuenta con 42 sacks y apuesta por una formación 3-4 que a Minnesota se le atragantó en la primera derrota de la campaña en Pittsburgh. Los locales apuestan por la fortaleza del DE Jared Allen pese a la bajada de su rendimiento en la segunda mitad de la temporada para que impulse a una defensa que derribó a los quarterbacks 48 veces en 16 partidos.
El partido históricamente maldito de los Colts
Indianapolis Colts vs Baltimore Ravens. Los Colts tiene un registro de 0-3 con first-round bye y desde 1998 han perdido el primer partido de Playoffs seis de nueve ocasiones. La historia puede sentar más dudas en los locales si los Ravens anotan pronto tal como hicieron en la primera jugada del partido de la Wild Card contra los Patriots. De ese mismo partido Baltimore ha extraído unas conclusiones muy simples: machacar con el juego terrestre de Ray Rice y exprimir el centro pocket para que Manning lance en movimiento (tal como hicieron con Brady). El problema es que Payton es el mejor quarterback de la historia en leer las jugadas segundos antes del snap.
«Los Ravens desafiarán la defensa de Indy«, comenta en analista de nfl.com Pati Kirwan, y es que el partido se preveé un duelo entre la linea ofensiva visitante y la retaguardia de los Colts al mando de los escurridizos Dwight Freeney y Robert Mathis. Defensa que ya ganó la última vez que ambas franquicias se vieron las caras en la Semana 11 de la presente temporada, y que debe obligar a lanzar más de lo normal al QB de segundo año Joe Flacco. En aquel partido, Baltimore se limitó a transformar cinco field goals para perder 15-17 en casa, trayendo a la memoria el último choque en que ambas franquicias se vieron en postemporada. Fue en 2007 (el año de la Superbowl de los Colts), también en un Divisional Playoff, pero en Baltimore, e Indy ganó por 6-15 en un choque de patadas entre palos, todas ellas transformadas por Adam Vinatieri y Matt Stover. Ambos estarán en la banda local este sábado y el ex-Raven será en kicker nº1.
San Diego Chargers vs New York Jets
Tanto Ravens como Jets tienen desafíos calcados. Se clasificaron para la postemporada en la última jornada de la temporada regular y vencieron a domicilio en Wild Card de forma convincente y utilizando con precisión sus principales armas: defensa y juego de carrera.
El rookie Shon Greene es otro de los corredores jovenes que está causando sensación en este final de temporada. Viene de correr 135 yardas en Cincinnati y tiene una habilidad extraodinaria para correr entre los tackles. «Corren la pelota contra todos los equipos con los que han jugado«, declaraba el head coach de San Diego, Norv Turner, durante la semana. Los Jets llegan al sur de California dispuestos a manejar de forma tan calibrada las dos facetas en las que es líder en la NFL: ataque terrestre contra la 20ª defensa de la liga contra la carrera y muralla defensiva.
Darrelle Revis está ante otro duelo con un receptor estrella, Vincent Jackson, pero la altura del Charger (6-5) puede perjudicarle en lanzamientos altos. La retaguardia visitante cargará con blitzs al estilo habitual de Rex Ryan sin preocuparle las consecuencias y ello puede beneficiar al TE Antonio Gates el jugadas de yardage corto. «Ryan puede utilizar exóticos blitzs gracias a que Revis elimina al receptor estrella«, escribe el analista Bucky Brooks de nfl.com.
El ataque San Diego, orquestado por un espectacular Philip Rivers en temporada regular tapado mediáticamente por Manning o Brees, puede encontrar en Darren Sproles la llave del choque en jugadas de scrimmage. Ofensiva que ha marcado esta temporada siempre más de 20 puntos y acumula 17 turnovers, la segunda que menos en la NFL, mientras que New York está 9-0 esta campaña cuando registra menos pérdidas de balón que su rival. Puede ser la revancha para los Chargers del partido de Wild Card de 2004/05 cuando perdieron 17-20 en casa sobre la bocina.