En la semana 11 analizamos el panorama para la postemporada Primeros análisis de lo que será la competición que comienza en enero en la NFC. Dos equipos punteros y un cúmulo de posibles wild cards en segundo plano. Pueden ser los Playoffs más interesantes de los últimos diez años, sin ningún descalabro de las mejores escuadras y con alguna que otra espectacular sorpresa. Empezando por la AFC donde se postulan tres grandes y batallosos equipos como favoritos, y acabando en la NFC en la que dos equipos de enorme potencial ofensivo sobresalen sobre los demás.
Vikings y Saints sólidos favoritos
Saints y Vikings, a priori, por los balances que ostentan y el juego que están demostrando deben ser los equipos que lleguen más lejos en postemporada. New Orleans Saints (9-0) está batiendo todos los récords de la franquicia y enamorando a la Liga por su vistoso juego explosivo. Los Saints son el primer equipo de la NFL en juego ofensivo en las estadísticas con 426.1 yardas por partido, cuarto en el pase y quinto en la carrera. Pese a la imbatibilidad, las dudas asaltan al equipo de Lousiana, que lleva cuatro semanas sufriendo en sus compromisos de fin de semana ante equipos inferiores en calidad como Rams o Panthers. Desde la paliza y exhibición a NY Giants en el Superdome en la semana 6, el equipo de Sean Payton no ha mostrado un juego consistente. Comentaba Drew Brees después del partido en Saint Louis: «no estamos jugando bien las últimas semanas«. Brees es una de las piezas que está fallando. En esas cuatro semanas ha lanzado siete intercepciones. Sigue siendo ese pasador rompedor e imponente pero, como toda su carrera, comete demasiados fallos. Errores que debe subsanar Payton si quiere ganar a New England Patriots en la Semana 12, en lo que supondrá la prueba de fuego para los Saints esta temporada regular. «El Monday Night de dentro de dos semanas es como el Dolphins-Bears del 85. Los Saints desafiarán el 16-0 de los Pats de 2007 sabiendo del momento de peligroso en el que están ahora«, comenta el analista de Sports Illustrated, Don Banks.
Si hay un equipo que ha generado menos dudas pese a cosechar una derrota, ese es Minnesota Vikings (8-1). En Mineápolis asalta a la mente de las masas la mentalidad perdedora de aquella campaña de 1998 donde acabaron 15-1 en la liga regular y perdieron la final de la NFC ante Atlanta Falcons con aquel field goal fallado por Gary Anderson. Pero en Minnesota no deben preocuparse porque tienen un conjunto muy sólido. Cuentan con uno de los mejores quarterbacks de la historia de la NFL, Brett Favre, que está cuajando una de las mejores temporadas en sus 19 años de carrera; con siete partidos por delante tiene un rating de 107.5, el mejor en casi dos décadas. Los Vikings tienen pase, tiene recepciones con Rice y el novato Harvin, tienen juego terrestre con el imponente Peterson y tienen una defensa agresiva (1ª en sacks). Además, como comenta Don Banks, «estos Vikings han aprendido a ganar en situaciones complicadas este año«.
Muchos candidatos para la wild card
Arizona Cardinals (6-3) ganará con comodidad una división fácil donde su máximos rivales son los irregulares San Francisco 49ers (4-5). Los de Phoenix son ese equipo no puntero en temporada regular pero la experiencia acumulada en los Playoffs del año pasado puede serles útil pese a jugar lejos de Arizona. «Da la sensación que pueden empezar a ganar un partido en el momento que quieran, incluso si están 14 abajo como contra Seattle el pasado domingo«, afirma Mike Sando de ESPN. Mientras, los del norte de California tienen e primer compromiso para buscar la postemporada esta semana en Lambeau Field ante Green Bay Packers (5-4), otro de esos equipos en la lucha encarnizada por las plazas de invitación pero que no termina de convencer. Los Packers son capaces de perder ante los endebles Buccaneers y dejar a 0 durante 49 minutos a los Cowboys la siguiente semana.
Por el potencial que tienen, Atlanta Falcons (5-4) debería acceder a la Wild Card. Los de Georgia viven horas bajas con una victoria en los últimos cuatro partidos, el QB de segundo año Matt Ryan con diez intercepciones en los últimos cinco choques y enfrentándose a la baja de su corredor estrella, Michael Turner para el compromiso del domingo en Nueva York ante los Giants. «Pero hay razones para el optimismo en el Giant Stadium porque Roddy White es de ese tipo de receptores que ha puesto en apuros a los Giants«, apunta en su análisis Jason Feller, de nfl.com. Los Giants, como cada año, lucharán en la «división de la muerte«. Se está repitiendo el capítulo de cada temporada de la lucha a tres bandas entre Dallas, New York y Philadelphia. Los tres capaces de lo mejor y lo peor.
Los Cowboys (6-3) de ganar cuatro partidos consecutivos, uno de ellos en Filadelfia con mucha seriedad, pero comenzar la temporada muy irregulares y perder la última semana en Green Bay con un ataque inoperante. Los Eagles (5-4), pueden perder ante los débiles Raiders pero ganar a los Giants sobrados, aunque de los cinco partidos ganados por los de Filadelfia cuatro fueron ante equipos con balances negativos. Y los Giants tienen mucho que decir tras las cuatro derrotas consecutivas que adornan sus estadísticas. La NFC Este es una total incógnita, y decidirán los balances de división y de conferencia porque, con toda seguridad, habrá empates en victorias y derrotas.
Descartados quedan Carolina Panthers (4-6) que perdió este jueves en casa, en el inicio de la semana 11, ante Miami Dolphins (5-5) por 17-24. Los Panthers se enfrentarán, probablemente, en cuanto acabe la temporada, al despido de John Fox (muy cuestionado) y el relevo del QB Jake Delhomme; y Chicago Bears (4-5), muy nerviosos y con Jay Cutler en horas bajas (5 intercepciones la semana pasada).
La previsión de este analista
- New Orleans Saints 14-2
- Minnesota Vikings 14-2
- NY Giants 11-5
- Arizona Cardinals 10-6
- Dallas Cowboys 10-6
- Atlanta Falcons 10-6