Max St.Pierre, jugador elegido en la ronda 27 del draft de 1997 por Detroit Tigers; a partir de ahí inició una carrera de 14 años por las ligas menores sin acceder ni una sola vez a las Grandes Ligas. 977 partidos en estas ligas menores es su principal estadística hasta el pasado 1 de septiembre cuando comenzó el periodo de ampliación de los rosters, porque los Tigers le llamaron a filas para ponerse el uniforme con la D.
Su carrera comenzó en el 97 en uno de los equipos asociados al club de Detroit en las ligas Single-A. Por ese nivel estuvo hasta 2002 cuando dio el salto a la Double-A donde jugó un total de 444 partidos. A partir de 2006 estuvo intercambiando participaciones en esta liga y en un nivel más en la Triple-A. Todas esas participaciones en clubes de la órbita de los Tigers, lo que demuestra que St. Pierre no solo ha sido un trabajador nato durante estos años, sino que también ha sido fiel a una organización. Todo un ejemplo a seguir.
La llegada de Max a la plantila de Detroit se debe a las necesidades en el puesto de catcher para el club. Aunque, presumiblemente no jugará mucho porque ocupa el número 3 en ese puesto tras Avila y Laird, el aterrizaje en las Grandes Ligas de St.Pierre es un ejemplo de perseverancia y constancia. El nativo de Canadá al menos puede presumir de ya tener estadísticas oficiales en la MLB, 25% de bateo y 1 hit.