La lógica cumplió. Lo que se especulaba en la previa, se concreto. El Mercury es el nuevo campeón de la liga femenina de baloncesto más importante del mundo, sin haber contado con una de sus estrellas. Una final que mantuvo en vilo a todo aficionado de Chicago que soñaba con un cuarto juego. La temporada llegó a su fin.
Fue un juego totalmente distinto a los dos primeros. Las diferencias nunca se alejaron de las mínimas. El primer cuarto finalizó en un 22 a 22. Del lado del Sky, Sylvia Fowles encontró la manera de perturbar la defensiva del Mercury con 14 puntos iniciales y mejorando ya su rendimiento en las finales, donde tenía un 11,5 PPG.
Elena Delle Donne volvió a tomar protagonismo y las locales jugaban con el corazón en la boca. Es que pudieron entrar a la pintura del rival, quien no pudieron contar con la mejor jugadora defensiva de la liga, Brittner Griner, quien estuvo en el banco. La jugadora volvió a tener problemas en la retina derecha y en unos de sus dientes, por lo cual se quedo fuera del juego.
En el transcurso del segundo cuarto, las acciones iban y venían. Actuación espectacular de Candice Dupree con 24 puntos que llevaba al Mercury a una ventaja de dos al fin de la primera mitad. Marcador: 45-43 para Mercury.
El tercer cuarto empezó y termino con desprolijidades. Errores de un lado y otro. Principalmente de Phoenix y de Diana Taurasi. La jugadora, con raíces argentinas, no sumó puntos, se la vio fastidiosa y muy individualista. La falta de rotación de la pelota se debió en gran parte a la ansiedad de la tres veces campeona de la NCAA. Por eso, y con una gran tarea de Allie Quigley que terminó con 19 puntos, el Sky se impuso 63 a 61.
Los últimos diez minutos finales hicieron temblar de nervios a las más de siete mil personas que colmaron el UIC Pavilion. Sandy Brondello, ordenó defender en zona y así lo hicieron. Mediante errores, el Mercury salió a flote. Y quien apareció para sentenciar, Diana Taurasi. En los últimos diez segundos, un doble y falta, hicieron cambiar la historia. Un final inevitable, 87 a 82.
Es justo decir que gano el mejor. Un equipo consolidado, que necesito de tiempo, hace dos años estaban ultimas, pero que se ajustaron a una de las estrellas del futuro, Brittner Griner. Un plantel que armo Sandy Brondello, quien se convirtió en la primer ex jugadora de la WNBA en lograr un título como entrenadora. Ella jugó en el Detroit Shock, Indiana Fever, Miami Sun y Seattle Storm.
Para Phoenix es el tercer título, igualando la marca del Detroit Shock. Los títulos del 2007 y 2009 y una final perdida allá por 1998 ante los Houston Comets. Diana Taurasi, quien estuvo en las dos consagraciones, tuvo 14 puntos en el último cuarto, en un nuevo récord. Ademas, se convirtió en la jugadora líder en puntos en finales, 262.
Es su segunda vez como MVP de las finales, antes en 2009. Es la tercera jugadora en ganar más de dos veces este reconocimiento. 4 para Cynthia Cooper y 2 para Lisa Leslie.
La temporada ha llegado a su fin. Un 3 a 0 contundente del Mercury que celebró en la ciudad de los vientos y que continuará con su fiesta en Phoenix. Un merecido campeón, un equipo con identidad y humildad que mantuvo un récord de 29 partidos en temporada regular. En Arizona, ¡están de fiesta!