Estas palabras del entrenador de los Indiana Pacers, Frank Vogel, sirven para ilustrar perfectamente el objetivo de su equipo para esta temporada:
“En este vestuario creemos que podemos obtener el primer puesto del Este. El hecho de que el 7º partido de las pasadas Finales de Conferencia no fuese en nuestra cancha marcó la diferencia en el viaje a las Finales, y vamos a hacer todo lo que esté en nuestro poder para tener un ‘Game 7’ en nuestra casa”.
En Indiana este año sólo vale ganar, sólo vale ser el número 1. Saben que eso puede ser el factor que haga que disputen unas Finales 14 años después o que las vuelvan a ver desde el sofá de su casa. Y sobre todo quieren ver marcado en el calendario que si tienen que jugar un 7º partido de la Final de Conferencia, lo harán en su propia casa.
Pero una racha de 4 derrotas en los últimos 5 partidos ha hecho que emerjan ciertas dudas en torno a su juego y su química y que muchos se pregunten cuáles son las opciones de Indiana en los Playoffs si consiguen el #1 del Este o si por el contrario se lo queda su mayor rival en esta lucha, los Miami Heat.
Estas cuatro derrotas se han sucedido ante Golden State Warriors, Charlotte Bobcats, Houston Rockets y Dallas Mavericks. Todos ellos equipos a los que Indiana puede ganar perfectamente pero que, por una serie de razones, el juego de los de Indianápolis ha bajado un escalón y ha estado a un nivel más igualado que el resto, en vez de en un nivel superior como ha demostrado todo este año.
Una de las bases de los Pacers es la defensa. Ahí han estado más flojos de lo normal y en ocasiones han permitido tiros cómodos a los rivales y por ahí es por donde han sufrido los de Frank Vogel. Además, el juego no ha sido tan dominante ni tan dinámico como estamos acostumbrado a ver, lo que hace que equipos como Charlotte o Dallas se puedan motivar y ver una oportunidad de vencer a uno de los equipos más sólidos de la liga.
Tampoco han estado finos en el ataque y no han tenido buenas rachas en cuanto a la selección de tiro y, sumado a un acierto más bajo de lo habitual, ha hecho que estos partidos hayan estado más igualados de lo previsible.
Con todo esto, el problema más grande para los Pacers si no consiguen ese anhelado primer puesto es el factor psicológico que eso supondría en la hipotética Final de Conferencia ante Miami.
Los Playoffs del Este parecen bastante claros y todo apunta, salvo hecatombe o lesión grave de alguna estrella, que Miami e Indiana se encontrarán de nuevo a las puertas de las Finales. Presumiendo una igualdad máxima y una eliminatoria que no se resolvería hasta el sexto o séptimo envite, los Pacers quieren tener la sartén cogida por el mango para asegurarse tener ese partido a cara y cruz en el Bankers Life Fieldhouse.
Además, Vogel sabe lo importante que es ese factor, y más en Playoffs, donde la temporada pasada tuvieron un balance sobresaliente.
“Si vamos a tener éxito en los Playoffs, tener el factor cancha nos daría una ventaja. Hicimos un 8-1 en casa en los Playoffs el año pasado. Perder el 7º partido fuera de casa fue una situación dura. Vamos a intentar hacernos con ese #1, vamos a por él”.
Actualmente el margen que separa a Indiana de Miami es de 2 partidos. A Indiana le quedan 18 partidos para acabar la temporada regular y todo puede pasar. Pese a que a ‘Indy’ le restan unos pocos encuentros menos que a los de South Beach (20) para acabar la temporada regular, el calendario parece algo más favorable para los Pacers para hacerse con ese primer puesto del Este.
Indiana sólo tendrá tres enfrentamientos más contra equipos del Oeste hasta llegar al partido número 82, dos de ellos (Spurs y Thunder) en casa y contra los Grizzlies en el FedEx Forum. El resto de partidos y viajes los realizará dentro de su conferencia y contra equipos de la misma y, a priori, no se le deberían escapar demasiadas victorias.
Por el contrario, los Heat tienen que jugar aún 7 encuentros contra equipos del Oeste, de los cuales sólo dos serán en cancha rival (Pelicans y Grizzlies). El resto, en el AmericanAirlines Arena, son contra Nuggets, Rockets, Grizzles de nuevo, Blazers y Timberwolves, y los que juegan contra equipos del Este son, en principio, asequibles.
Aún así, hay dos encuentros entre medias marcados en rojo intenso en el calendario, y son los dos partidos que les queda por jugar a Pacers y Heat en su serie particular de la temporada. Por ahora han hecho tablas (1-1) y, precisamente, cada uno ha ganado el encuentro que ha jugado en su cancha y con diferencias inferiores a 10 puntos (+6 Indiana, +3 Miami) en cada partido, lo que da una mayor dimensión a la importancia de conseguir ese primer puesto del Este.
“Lo vemos como si jugásemos contra los Heat cada noche porque esperamos que ellos ganen cada noche y tenemos que ganar para seguirles el paso”, Roy Hibbert.
Los Pacers buscarán lograr su objetivo como sea. Al precio que sea y con lo que haga falta. Porque saben que no sólo van a competir con los Heat en estos próximos meses, sino que ya lo llevan haciendo desde el mes de noviembre. También saben que cualquier detalle que suceda en estos próximos meses antes de los Playoffs puede ser determinante en el mes de mayo y, en este caso, no es lo mismo ser el número uno que el número dos.