Se lo podemos agradecer al nuevo reglamento de puntos o quizás al nuevo paquete de mejoras del Gen-6, pero el inicio de temporada que estamos viviendo en NASCAR es para enmarcar. La carrera de ayer domingo en Martinsville es un claro ejemplo de esto. Cambios continuos en el liderato, batallas por la posición en todo el pelotón y un final de infarto de los que levantan al público de sus asientos.
La carrera comenzaba con una primera linea copada por los Toyota de Joe Gibbs con Kyle Busch al frente, acompañado por un Denny Hamlin que volvía en plena forma tras su baja por sinusitis la semana pasada en California. Ya en la primera vuelta, Martinsville demostraría su fama de circuito de chapa al producirse una colisión múltiple en la parte de atrás del pelotón con hasta ocho vehículos implicados.
Ya en la vuelta 40 y con la carrera neutralizada por bandera amarilla, una colisión en la linea de boxes, entre Kurt Busch, Kasey Kahne y Brad Keselowski dejaría muy dañado el coche de este último. Tras unas vueltas reparando los daños, Brad regresó a pista decidido a devolverle la jugada a un Kurt Busch, al que Brad consideraba culpable de lo sucedido. Varios golpes de chapa entre ambos y un dedo corazón mostrado por Keselowski, dejó el asunto más calmado.
Mientras tanto, la carrera se desarrollaba con continuos cambios de liderato pero manteniendo siempre a Jimmie Johnson como claro favorito a la victoria. En ese grupo de cabeza, cabe destacar la presencia de los dos coches de Petty Motorsports, que de la mano de Marcos Ambrose y Aric Almirola querían dedicarle un buen resultado al patrón del equipo Richard Petty, que esta semana había perdido a su esposa.
Con un Jimmie Johnson que resistía continuamente los intentos de Edwards y Bowyer por arrebatarle el liderato, llegamos a las 100 últimas vueltas. El primero en retirarse de la lucha era un Edwards, quien tras realizar un trompo en solitario continuaría en carrera algo retrasado. Solamente unas vueltas antes, Bowyer por fin había conseguido adelantar a Johnson. Pero en la detención en pit durante la amarilla causada por Edwards, su equipo lo retrasaría muchos puestos con un cambio de ruedas penoso.
Ya solo quedaban 40 vueltas y Joey Logano y Kurt Busch tomaban el relevo en la caza del seis veces campeón. Pronto Kurt se deshizo de Logano y asistimos a la enésima batalla mano a mano entre Kurt y Jimmie. Kurt conseguía ponerse primero a falta de 27 vueltas y a partir de ahí, la carrera fue una continua lucha de Jimmie por tratar de volver a adelantar a Kurt hasta la bandera a cuadros.
Primera victoria para Kurt Busch desde Dover en 2011. Una victoria balsámica, teniendo en cuenta lo que ha tenido que pasar estos dos años el mayor de los hermanos Busch, tras su despido de Penske a finales de 2011.
Dale Jr., Logano, Ambrose, Kenseth, Harvick, Almirola, Bowyer y Menard completaron el Top-10 final. El campeonato vuelve a ser liderado por Dale Earnhardt Jr. seguido de Kenseth y Edwards a 9 y 10 puntos respectivamente.
La próxima cita de la temporada será el domingo que viene en Texas, a las 21h hora peninsular y con los caballeros de Duck Commander como patrocinadores de la carrera.