Año número 122 de la Stanley Cup entre el campeón de la conferencia oeste, de nuevo los Chicago Blackhawks, y el campeón de la conferencia este, los sorprendentes Tampa Bay Lightning. Era la segunda aparición de los de Florida en la historia de la franquicia, y la tercera de los Hawks en seis años, las dos anteriores levantaron título. Los Bolts venían de eliminar en Playoffs a tres equipos Original Six, Rangers, Red Wings y Canadiens; mientras, Chicago había hecho otra postemporada espectacular y agónica en cada eliminatoria.
Las series de Stanley Cup de este año se han caracterizado por la igualdad. Todos los partidos excepto el sexto y último se decidieron por un gol. En el primer partido, un gol tempranero y acrobático de Alex Killorn encendía a la hinchada local de Tampa Bay. Los Lightning aguantaron el marcador, pero nunca puedes dar por muerto a estos Blackhawks. Chicago es Chicago, durante los 60 minutos, por lo que el equipo de Illinois se escapó vivo del oeste de Florida con dos goles rápidos al final del partido (1-2), el segundo de Antoine Vermette en un fallo defensivo local. En el segundo partido, Tampa aprendió la lección. Un golazo de Cedric Paquette abrió el choque, seguido por un segundo periodo loco de alternancia del marcador, para Jason Garrison anotar el 4-3 de la victoria en un powerplay en el último periodo a falta de 11 minutos para sonar la bocina.
En el tercer partido, ya en el United Center de Chicago, se produjo el momento más dramático con el gol de Paquette a falta de tres minutos para terminar el choque. Victor Hedman patinó toda la pista para dar el pase de gol al canadiense. Un partido donde Blackhawks y Lightning se alternaron el dominio por cuartos, y que iba a poner por delante en las series a los sureños, la única vez. En el cuarto partido, por primera vez en todas las series, Chicago marcaba primero. En el primer periodo los visitantes solo permitieron dos disparos a los Hawks, en parte protegiendo al nuevo portero Andrei Vasilevskiy, que sustituía a Ben Bishop, quien venía trayendo una lesión desde el segundo partido. Brandon Saad anotó el tanto del triunfo en el tercer periodo para empatar las series a dos.
En el quinto partido, de vuelta a Tampa, los Blackhawks se adelantaban con un tremendo error defensivo de los Lightning: Bishop y Hedman no se entendieron dando el gol en bandeja a Patrick Sharp. Los locales empataron, pero Antoine Vermette dio el tanto de la victoria a Chicago en el tercer periodo. En el sexto partido, en Chicago y todo favorable para los Blackhawks, el equipo del indio marcó dos tantos por obra de Duncan Keith y Patrick Kane para dar la tercera Stanley Cup en seis años a los Chicago Blackhawks.