Pittsburgh 31-24 Baltimore
El partido prometía ser épico, y lo fue. Era 3&19 cuando Ben Roethlisberger conectó 58 yardas sobre el rookie Antonio Brown para poner a los Steelers a punto de caramelo del touchdown y del partido; luego fue Rashard Menderhall el que anotó el touchdown con 1:33 en el reloj. Antes, muchas peleas, challenges, pases caídos, fumbles, intercepciones, lo que suele ser este duelo. Pittsburgh viaja al campeonato de la AFC tras una espectacular remontada en la segunda parte sobre unos Ravens que se derrumbaron tras unos excelentes primeros treinta minutos. Es la quinta final de la AFC que disputan en las últimas diez temporadas.
Uno de los cuartos más miserables en la historia de Baltimore, el tercero, cambió el rumbo de la historia de esta rivalidad divisional, feroz. Los Ravens podían haber superado esta noche el éndemico problema que tienen con los acereros en Playoffs, ganaban 7-21 al descanso, pero los Steelers sacaron la madera de campeón para recuperarse de los turnovers de los primeros treinta minutos, provocar tres recuperaciones en el tercer cuarto y remontar un partido que parecía imposible por las maneras que estaban demostrando los de Maryland.
Joe Flacco tendrá que seguir buscando la madurez porque hoy el más veterano, Roethlisberger, dio «el callo» en el momento adecuado; 19/32, 226 yardas y 2 TD para ‘Big Ben’ que nunca dejó abandonado a un equipo que dio un auténtica lección de football en la segunda parte.