Pese a que la MLB, NHL, NBA y NFL son reconocidas internacionalmene como las grandes ligas estadounidenses, todas, excepto la última, tienen franquicias más allá de las fronteras del país. Para ser más exactos, las ligas decidieron que tener equipos en Canadá podía ser una gran forma de atraer nuevos aficionados y crear nuevos mercados. La liga de béisbol decidió dar el paso en 1969, cuando la Liga Nacional decidió expandirse y crear un club en Quebec, los Montreal Expos. Nos Amours se mantuvieron en la competición durante 35 años antes de mudarse en 2004 a Washington y renombrarse como los Nationals. En esas tres decadas y media la franquicia no logró levantar ni una vez el trofeo de las World Series y su único éxito fue ganar la división Este de su liga en 1981.
La Liga Americana no tardó en acudir al «Great White North» y creó una nueva sede en Toronto, dando vida a los Blue Jays en 1977. El conjunto de Ontario tuvo más éxito y se proclamó campeón del Fall Classic en 1992 y 1993. Sin embargo, los últimos veinte años han sido una travesía por el desierto (helado) para los canadienses. No han ganado ni una vez su división, no han vuelto ha jugar los Playoffs y sólo nueve veces han alcanzado por lo menos el 50% de victorias, la última vez hace dos años cuando terminaron 81-81.
Para el General Manager Alex Anthopoulos parece que veinte años son mucho y ha decidido poner toda la carne en el asador para ganar ya y llevarse de nuevo el Commisioner´s Trophy a su lado de la frontera. Para ello ha tenido una de las Offseasons más activas de las Majors y se ha dedicado a firmar agentes libre y hacer trades dando una auténtica lección de como manejar el comercio exterior. La prueba más clara es que de una temporada a otra su payroll ha crecido de $82.4 millones a unos $114.8.
Entre los principales movimientos, destacan, por un lado, varias entradas y salidas por medio de free agency. Nada más terminar la campaña dejaron marchar a su second baseman titular Kelly Johnson, que tuvo un año flojo al cometer 156 Strikeouts en 142 partidos con una línea de bateo de .225/.313/.365 y a los relief pitchers Carlos Villanueva, Jason Frasor y Brandon Lyon. Además, no ejercieron la opción que tenían sobre Rajai Davis, pero le acabron renovando por un año. En cuanto a los jugadores fichados por esta vía destacan el infielder Maicer Izturis, el outfielder Melky Cabrera y el utilityman Mark DeRosa.
No obstante la base del comercio exterior este año en Toronto han sido los trades. Dos de esos intercambios han sido probablemente los más destacado de la MLB este año. En noviembre el club envió a Henderson Álvarez, Yunel Escobar, Adeiny Hechavarria, Jeff Mathis y tres prospects a Miami por el CF Emilio Bonifacio, C John Buck, SS José Reyes y los pitchers Mark Buehrle y Josh Johnson. Por si esto fuera poco, en diciembre Anthopoulos decidió dar otro golpe en el mercado de fichajes y envió a dos de sus mejores prospects C Travis d´Arnaud y RHP Noah Syndergaard, al también jugador de Minors OF Wuilmer Becerra y al veterano C John Buck a los New York Mets en un trueque que les trajo al gandor del Cy Young Award R.A. Dickey y a los catchers Josh Thole y Mike Nickeas.
Todo esto está muy bien, muchos datos y la información clave, dejando claro que la frontera entre Estados Unidos y Canadá ha sido un ir y venir de mercancía, dando más vida que nunca al comercio exterior. Pero ¿surtirán efecto estos cambios?, ¿serán los Jays verdaderamente competitivos? Vamos a ello:
El equipo de Ontario ha decidido ir a por todas este año. Casi a doblado su payroll y ha invertido parte de los prospects que iban a ser la base de su futuro con tal de ganar ya. De los jugadores adquiridos cuatro deberían tener un impacto inmediato. José Reyes aporta un valiosísimo bate como leadoff hitter (ya fué el líder de bateo de la Nacional en 2011) y un buen guante como shortstop. El gran cambio está en la rotación. Toronto tiene nuevo ace en R.A. Dickey que ganó el Cy Young Award el año pasado, el mejor de su carrera en el que termino con 20-6 y un ERA de 2.73 lanzando cinco partidos completos y logrando tres shutouts. Además lidero la liga en innings lanzados y strikeouts. Mark Buehrle ganó 13 partidos en un equipo que acabó con 69 victorias y obtuvo el Gold Glove por cuarto año consecutivo. Josh Johnson tuvo un año flojo, pero a lo largo de su carrera ha demostrado un gran potencial. A esto hay que añadir a Brandon Morrow que el año pasado tuvo un ERA de 2.96. De este modo los Blue Jays parece que por fin cuentan con una rotación sólida, después de que el nefasto starting pitching del año pasado, en el que sólo Morrow tuvo un ERA inferior a 4.50.
En cuanto al bullpen el equipo tiene bien cubierto el puesto de closer con Sergio Santos y Casey Janssen. El primero logró 30 saves en 2011 y el año pasado sólo puedo jugar seis partidos por una lesión de hombro, pero logró salvar dos victorias. Habrá que ver si vuelve sano, pero si no lo logra los Jays disponen de Casey Janssen que el año pasado hizo un gran papel. El resto del bullpen parece mejorado respecto al año pasado, cuando quedo 25º en ERA entre todos los grupos de pitchers suplentes de la liga. Hacia final de la temporada y durante la offseason, han incorporado algunos buenos jugadores con brazos potentes, pero para mí es el punto débil del cuerpo de lanzadores.
Entre los postion players, Toronto cuenta con uno de los mejores power hitters de las Mayores: José Bautista. El rightfielder bateó 54 y 43 home runs en 2010 y 2011 respectivamente. En 2012 sólo pudo jugar 92 partidos por una lesión en la muñeca, pero aún así logró sacar la pelota del campo en 27 ocasiones. No obstante, parece que ya está bien recuperado por lo que no debería tener problemas. El otro bate poderoso del equipo es el del DH Edwin Encarnación, que había demostrado capcidad para batear entre 15 y 20 home runs por temporada, pero el año pasado explotó logrando 42. Veremos como evolucionan los dos jugadores, pero lo que es seguro es que su total de RBIs se verá positivamente influenciado al tener a José Reyes bateando primero.
El resto del lineup del año pasado estaba también basado en el bateo de poder. Los Blue Jays quedaron quintos de la Liga Americana en HR totales al sumar 198. El problema estaba en el pobre porcentaje de bateo. Ninguno de los titulares habituales llegó a .300 de promedio y equipo quedó 11 de la AL en este apartado con .245. Esto hizo que no se aprovecharán los home runs todas las carreras que hubiesen sido posibles. José Reyes será de gran ayuda en este apartado, pero el resto de jugadores necesitan mejorar en este aspecto si quieren ser aspirantes a algo.
La gran incógnita es Melky Cabrera. El outfielder firmó un contrato de dos años y $16 millones tras ser All Star por primera vez en su carrera y promediar .346 de bateo en 116 partidos con los San Francisco Giants antes de ser sancionado 50 partidos por dar positivo en productos dopantes. Hace pocos día un reportaje del Miami News Times le conectaba con una clínica de Miami que habría dado esos productos. Habrá que ver como reacciona a todos estos problemas, pero si puede estar alrededor de los .305 que promedió en Kansas City, Toronto tendría una buenísima parte alta del lineup, con promedio para llegar a base y poder para impulsar carreras.
Otro de los grandes problemas de los Blue Jays ha sido su división. Durante los 20 años transcurridos desde el último título (y última presencia en postemporada) de Toronto, los equipos de la AL Este han ganado las World Series 7 veces, (cinco los Yankees y dos los Red Sox). En este periodo los Yankees sólo han logrado menos de 90 victorias en cuatro ocasiones llegando a las 114 en 1998 y tan solo se han perdido los Playoffs en dos ocasiones. Esto ha convertido la tarea de llegar a la postemporada en algo casi inalcanzable. Sin embargo, Boston se encuentra en pleno proceso de reconstrucción por lo que a priori no debería de ser un gran obstáculo. Los Yankees tienen una plantilla con una edad media de 33 años y sus grandes estrellas, Derek Jeter y Alex Rodriguez, ya están dando muestras de su edad con múltiples lesiones. Además ARod se ha visto envuelto en el problema de clínica de Miami. Todo esto hace que los Bronx Bombers den menos miedo que en los últimos años.
Por lo tanto, Anthopoulos ha elegido un buen año para jugársela. No obstante, esto no quiere decir que vaya a ser tarea fácil, porque si algo va a tener la división este año es igualdad. Tanta que cualquier equipo (excepto, probablemente, los Sox) tienen opcines de ganarla. Los Rays han demostrado que saben como crear un equipo competitivo con poco presupuesto y Joe Maddon sabe como exprimir ese talento para ganar. Los Orioles van a querer demostrar que lo del año pasado no fue casualidad. Por último, los Yankees son los Yankees y no se les puede descartar pese a que la mitad de su plantilla ya tenga edad para aprovechar los descuentos a jubilados. La AL Este promete una lucha a cuatro bandas hasta la última jornada.
Los Blue Jays han mejorado sus defectos del año pasado: Pitching, tanto rotación como bullpen, y bateadores capaces de obtener hits con regularidad. Pero para que la inversión sea exitosa varias cosas tienen que salir bien. R.A. Dickey tiene que ser eficiente para que la rotación tenga un ace sólido. Creo que lo logrará, pero sus números no serán los del año pasado. !Ojo! Dickey es uno de mis jugadores favoritos y tiene ese knuckleball tan especial, más rapido que ninguno visto antes. Sin embargo, tiene 38 años (aunque la edad no es tan importante para un knuckleballer), pasa a la Liga Americana donde se tendrá que enfrentar a Dessignated Hitter y , sobre todo, sus números del año pasado son una excepción y no la norma en su carrera, especialmente en los apartados de innings lanzados y strikeouts.
Melky Cabrera debe estar al nivel de su año en Kansas City, logrando un buen average para que los power hitters les lleven a anotar carreras. Sinceramente, es una incógnita saber cómo le habrán afectado sus problemas off the field.
Necesitan que José Bautista esté sano y no se pierda casi la mitad de los partidos. Seamos sinceros, todos los equipos necesitan a su mejor jugador. Es probable que lo logre, ya que a lo largo de su carrera no ha sido un jugador conocido por perderse muchos encuentros.
Pero, sobre todo, necesitan saber llevar la presión de jugarse la división en una contienda que estará apretadísima. Teniendo en cuanta que llevan 20 años sin Playoffs, muchos jugadores serán inexpertos en estas lides, por lo que necesitan buen liderazgo por parte de los veteranos para que crean en ellos mismos. Si lo logran puede que los equipos de postemporada tengan que prepararse para viajar a Canadá.