Tras cumplirse el primer mes de regular season en la MLB, sabiendo además que la temporada no ha hecho más que comenzar, nos sorprende a muchos la clasificación en la divisón este de la Liga Americana. Desde hace algunos años, es normal que Yankees o Red Sox empiecen la temporada un poco fríos, sus estrellas se vayan aclimatando a la temporada tras un largo invierno de vacaciones y un Spring Training en el que muchas veces aún siguen de vacaciones. Pero lo sorprendente tras este primer mes de competición tal cual, es que los dos equipos, los dos gallos de la división y de la MLB incluso, estén compartiendo las últimas posiciones del grupo.
Seguramente en un mes y medio o dos meses como mucho, un poco antes del All Star, ambas franquicias estén a pleno rendimiento en busca de una de las plazas de playoffs en octubre, buscando repetir éxitos pasados y si es a costa del eterno rival, mejor que mejor. Pero como a Baltimore Orioles, Tampa Bay Rays y Toronto Blue Jays, les tome el gusto a ganar partidos y en las series directas frente a los dos grandes gallos (como ha pasado con el barrido de los Orioles en Fenway este fin de semana) vayan obteniendo buenos resultados, tanto Yankees como Red Sox van a sufrir de lo lindo para llegar a octubre. Además de un arranque apático de ambos históricos de las Grandes Ligas, el factor lesiones está dañando los planes de Red Sox y lo empieza a hacer en el plan de los Yankees.
Por lo tanto, además de recordar que los Tampa Bay Rays ya han alcanzado incluso unas World Series en 2008, los apagados Baltimore Orioles y Toronto Blue Jays pueden dar sabor, intensidad y desde luego emoción a una división que en mayor o menor medida todos predecimos que la ganarán sí o sí Yankees o Red Sox. Todo lo dicho puede quedar en una anécdota de arranque de temporada, pero aunque las Grandes Ligas son un largo maratón, los dos grandes gallos ya empiezan con desventaja con estas crisis que sufren: New York (15-13), Boston (11-16).