Esta noche comienzan los Playoffs de las Grandes Ligas de béisbol con un pequeño aperitivo, las wild cards que esta temporada tienen un formato diferente pues se disputan entre dos equipos a un solo partido, el ganador estará en la ronda divisional de su liga. Analizamos como llega cada equipo a esta postemporada en busca de las Series Mundiales.
LIGA AMERICANA
Los Yankees vuelven a estar en Playoffs, un año más. Se le ha criticado mucho a este equipo por la veteranía, la media de la plantilla es muy alta, no parecía que la lesión de Mariano Rivera fuera muy buena, pero los del Bronx tienen recursos de sobra. Y cuando hablamos de recursos, hablamos de la línea de bateo más potente de los Playoffs, por supuesto, los ‘Bombers’. La máquina ofensiva de los Yankees tendrá que contrarrestar sin embargo que ya no son lo que eran en el montículo. La rotación se puede resentir por la veteranía de Sabathia, y el bullpen, que en teoría es lo que más vale en estos Playoffs, es una incógnita. Pero los Yankees son los Yankees, y siempre son favoritos pese a no ganar el título desde 2009. Jugarán la ronda divisional con el ganador de la wild card.
La temporada regular ha sido muy irregular para estos Tigers que por segundo año consecutivo han dado un sprint final muy bueno para terminar ganando la AL Centro. La figura de Miguel Cabrera lo ha centrado todo con una temporada espectacular en la que se ha llevado la triple corona. Sin embargo no es la ofensiva el punto fuete de Detroit, sino una rotación titular con el todavía MVP Justin Verlander, Scherzer que viene de su mejor temporada, además de Fister y Sánchez que han hecho un buen final de campaña. Sin embargo, los problemas en defensa se multiplican, y en Michigan no quieren que se les escape unas Series Mundiales por fallos defensivos como la temporada pasada. Los Tigers jugarán contra los Athletics la ronda divisional.
Después de muchos años, los Athletics vuelven a los Playoffs y por la puerta grande, ganando la AL Oeste con una semana final espectacular, gracias también al colapso de Texas. Es por eso que el equipo californiano puede llegar con una moral por las nubes ante el enfrentamiento divisional ante los Tigers. Parece mentira que este equipo se haya vuelto tan ofensivo, pero ha liderado las Grandes Ligas en home runs y carreras desde el descanso del All-Star. El otro punto fuerte es la defensa, con un outfield que es imposible encontrarlo mejor, Céspedes, Reddick y Crisp. Por no hablar de la profundidad de banquillo donde se puede hacer hasta dos line ups de garantías.
Los Rangers son la nota negativa de estos Playoffs. Los dos veces ganadores de forma consecutiva de la Liga Americana han protagonizado un colapso la última semana donde han perdido cinco partidos de ventaja para quedarse en una wild card que esperan que no les cueste un disgusto. Reciben a los Orioles en la wild card del viernes. Obviamente, los tejanos vuelven a inspirarse en la ofensiva con una línea de bateo que es la misma de los pasados Playoffs y que ha liderado la MLB en carreras. El problema viene en los jugadores que vienen detrás, que carecen de poca confianza lo que da al equipo poca profundidad. Eso sí, desde el montículo esta la figura de Yu Darvish que puede dar mucha confianza si avanzan de ronda.
En Baltimore ya ni se acuerdan de la última temporada que jugaron los Playoffs y la campaña ha sido muy notable, sobre todo sabiendo que juegan en la competitiva AL Este. Los Orioles finalmente no han podido ganar la división solo por dos partidos y se ven condenados a este partido de wild card que te deja fuera en un solo partido si lo pierdes. La rotación no es ni mucho menos la mejor de todos los equipos de Playoffs, de hecho han ganado 93 partidos en temporada regular con un solo pitcher en dobles números de victorias, pero es que el bullpen siempre ha respondido: 74-0 esta temporada después de liderar las primeras siete entradas y 29-9 en partidos de una sola carrera de diferencia. Por no hablar de la tremenda estadística en entradas extra. Por moral y momentum también se gana un título.
LIGA NACIONAL
La ciudad de Washington DC no tenía un equipo de béisbol en postemporada desde 1933. Básicamente, es la primera experiencia de la gran sorpresa de la National League esta temporada que jugará contra el que gane la wild card entre Atlanta y St Louis. Los ‘Nats’ no tendrán a su ace Stephen Strasburg, ya descansando desde hace un par de semanas, pero con mucha ilusión, una unidad defensiva muy eficaz y, sobre todo, mucha profundidad de banquillo, esperan llegar a las Series Mundiales siendo la sorpresa de las sorpresas. En su contra, no solo la inexperiencia sino el bullpen, tan clave siempre en Playoffs, con su cerrador, Drew Storen siendo nuevo en estas lindes.
Los Reds pueden ser un equipo que no levanta mucha polvareda mediática pero el conjunto es muy sólido en todos los aspectos. Vuelven a la postemporada dos años después cuando los Phillies les machacaron desde el montículo. Homer Bailey no será de inicio en las divisionales, que empiezan jugando contra los Giants, pese al no-hitter de la semana pasada, pero la rotación es sólida con Arroyo, Latos y Cueto. El bullpen un seguro con los 38 saves del potente brazo de Chapman, que no se queda solo, y la defensa probablemente es la que tiene más nombres, Phillips, Rolen, Votto. El problema, Cincinnati es el conjunto que peor promedio de bateo y menos carreras ha anotado desde el 1 de Septiembre.
Dos años después de aquel épico título, los Giants buscan repetir faena. Ningún otro equipo tiene tres pitchers con al menos 14 victorias y un ERA de 3.50, y eso pese al mal segundo año de Vogelsong y la desaparición por completo de Lincecum. Sin Melky Cabrera con toda probabilidad, la ofensiva se resiente, pero ya demostraron los californianos en 2010 que se puede ganar un campeonato desde el montículo, por lo que esperamos unos Giants muy parecidos. En la ronda divisional jugarán con los Reds.
Después del tremendo descalabro de la temporada pasada, los Braves se han recuperado bien en 2012 para esta vez sí jugar los Playoffs, sobre todo para despedir a Chipper Jones con un posible título. Pero el primer escollo pasa por acabar con los actuales campeones en la wild card, precisamente el equipo que les remontó para quitarles la plaza de postemporada en 2011. Lo tienen todo a favor, juegan en casa y luego les esperaría Washington. Partiendo de la rotación que probablemente es su punto más bueno, el bullpen ha respondido bien esta temporada liderado por Craig Kimble, muy dominante los seis meses de temporada regular.
Los actuales campeones vuelven a clasificarse in extremis, por eso nadie se fia de ellos, porque ya vimos de lo que fueron capaces la temporada pasada, aunque no esté Pujols, aunque no esté LaRussa. Tienen muchos buenos jugadores de béisbol, lo que les da profundidad de banquillo, aunque no sean brillantes siempre rinden, y se encuentran ante muchas barreras. La primera de ellas es que su balance lejos de Saint Louis es muy malo (38-43) y la wild card la juegan fuera de casa, la segunda es que su entrenador es novato por estos lares de postemporada, y la tercera es que han perdido 5 de los 6 enfrentamientos ante los Braves en 2012. Pero es un solo partido la wild card.