La huelga nos privó del final de la temporada regular, de los Playoffs y las World Series no se disputaron por primera vez en casi 90 años. También nos arrebato la posibilidad de saber como terminaría la temporada del equipo de Montreal, que en 1994 vivió su mejor año desde que había ingresado a la liga en 1969. Así mismo nos quito la chance de ver que el desenlace del histórico despeño de varios jugadores que estaban teniendo la temporada de sus carreras, sobre todo: Matt Williams y Tony Gwynn.
El año 1994 fue un año bisagra para otros dos equipos además de «Les Expos», tanto Yankees e Indians estaban viviendo excelentes temporadas hasta el 11 de Agosto con récords formidables y en camino a dejar años de mediocridad, muchas derrotas y sin postemporada. Ellos también fueron perjudicados.
Persiguiendo a Roger Maris

Para cuando el béisbol entró en huelga el 12 de Agosto de 1994, el casillero estadístico de home runs de Matt Williams de los San Francisco Giants marcaba 43, ¿Por qué la relevancia? Se encontraba en buen ritmo y con posibilidades de alcanzar o batir el récord de 61 home runs en una temporada de Roger Maris. Favorecido por su ubicación en el batting order de los Giants ya que bateaba después de Barry Bonds, Williams recibía en su turno de bateo los strikes de los pitchers que no se animaban a tirarle al slugger y estrella del equipo de la Bahía.
Para el primer mes de la competición ya tenia 10 home runs en su haber, el mes de mayo fue el más flojo con 9, para junio ya había vuelto a su estándar de 10 HR al mes, julio con el Juego Estrellas próximo fue su máximo en la temporada con 11 «bambinazos», y el conteo paró en tres en los nueve juegos que participó en agosto antes de la huelga. Las proyecciones estadísticas vislumbraban que el jugador estaba encaminado a como mínimo igualar la marca de 61 «vuela cercas» y empatar el récord que Maris había establecido en 1961. Williams terminó la inconclusa temporada con 43 HR, 96 RBI, y una slash line de .267/.319/.607, fue segundo en la votación al MVP de la National League. «The Carson Crusher» nunca más pudo acercarse siquiera a la marca de 40 cuadrangulares por el resto de su carrera, solo en 1999 llegó a 35 jugando para los D-Backs de Arizona.
Matt Williams no fue el único perjudicado ya que había un grupo de jugadores encendidos que lo seguían muy de cerca: Ken Griffey, Jr. con 40, Jeff Bagwell tenía 39, Frank Thomas con 38 y Barry Bonds 37, todos con el mismo objetivo, romper el récord de 61 cuadrangulares.
Buscando el .400 de batting average
Si les pareció que Matt Williams desafió a la historia intentando romper la marca de home runs en una temporada, qué decir de la cruzada histórica que protagonizó Tony Gwynn buscando llegar al .400 de promedio de bateo en una temporada. Suponía entrar en la inmortalidad de los récords para siempre y ser parte de club selecto de tan solo 28 peloteros que lo lograron en Major League Baseball, el último fue Ted Williams en 1941.
Tony Gwynn tenía 34 años en 1994, era conocido en el béisbol como un «bateador profesional»: fino, disciplinado, con baja cantidad de strikeouts, era un contact hitter en toda regla, bateador de líneas que usaba el largo y ancho del terreno, fue una máquina de batear hits. Conocido como «Mr. Padre» por pertenecer toda su carrera en el equipo californiano, la temporada del ’94 era la décimotercera como profesional de Gwynn en San Diego. Durante la primera mitad de campaña promedió .383, y en los 23 juegos que le siguieron al All-Star Game y hasta la suspensión de la temporada fue de .427. En el mes de agosto, en once juegos su average fue .427 y solo se ponchó en una sola vez en 40 turnos al bate. El 11 de agosto, cuando Gwynn dejó el Astrodome de Houston en el último juego del año, estaba a tan solo 3 hits de alcanzar los .400 de promedio de bateo.
Los Yankees e Indians fueron los «Expos» de la Liga Americana
Sin duda los Expos de Montreal son los más recordados por ser perjudicados por el «strike» de jugadores, pero hubo dos equipos que estaban viviendo temporadas de ensueño y que esperaban que ésta fuera la de su despegue luego de vivir años de miseria de resultados y sin postemporada.
New York Yankees
Desde 1981 que no había postemporada en el Bronx. Al comenzar el lockout, con 70-41 tenian el mejor récord de la Liga Americana y estaban 6.5 juegos por delante de los Baltimore Orioles en la AL Este. Era un equipo con veteranos establecidos en la liga mezclados con jóvenes haciendo su primera experiencia en las Mayores en donde destacaban Don Mattingly, Wade Boggs, Paul O’Neal, y al comando de Buck Showalter.
Los Yankees de 1994 basaban su fortaleza en la ofensiva, anotaron 670 carreras siendo Boggs (3B) y O’Neal (RF) los estandartes. El ex jugador de los Red Sox promedió .364 mientras que el jardinero derecho puso unos números increíbles: .359/.460/.603. En el pitcheo, el zurdo Jimmy Key (17-4) fue el líder en victorias de la Liga y terminó segundo en la votación del Premio Cy Young.
Esta temporada debe marcarse como el nacimiento de los «bombaderos del Bronx». Fue el indicio de lo que ocurriría dos años más tarde cuando se consagraron campeones de la Serie Mundial y comenzaron la dinastía Yankee de finales de los 90 y principio de 2000. Muchos apellidos del roster de 1994 dos años después se coronaron campeones (O’Neal, Key, Boggs, Bernie Williams).
Cleveland Indians
Después de un muchos años con más sinsabores que alegrías para los Indians (su última participación en unas World Series había sido en 1954), la temporada de 1994 parecía sonreírle a la tribu, habían inaugurado el Jacobs Field, el equipo poseía un núcleo de jugadores cargado de estrellas como Carlos Baerga, Omar Vizquel, Kenny Lofton, Manny Ramirez, Jim Thome, entre otros, y estaban dirigidos por Mike Hargrove. Para cuando la huelga comenzó tenían un récord de 66-47, si bien estaban segundos en la AL Central, un juego por detrás de los White Sox, poseían claras chances de estar en Playoffs ya sea por ganar la división o el comodín en donde lideraban los standings. Su principal arma era el bateo y la velocidad, terminaron primeros en hits, dobles, carreras anotadas y segundos bases robadas. Ssus valuartes fueron Albert Belle, con 36 HR y 101 RBI, Kenny Loftonm con .332/.393/510 y 60 bases robadas, y la dupla Murray-Baerga culminó con 36 cuadrangulares y 156 carreras impulsadas.
En las próximas cinco temporadas gracias el núcleo que se formó en 1994, los Indians se transformaron en un fuerza dominante en la AL Central, pasando a postemporada cada uno de esos años. En 1995 y 1997 llegaron a la World Series, perdiendo en ambas ocasiones. Establecieron un récord de 455 «sell outs» consecutivos en el Jabobs Field desde 1995 a 2001.

Los que nunca se despidieron
¿Qué tienen en común Bob Welch, Lloyd McClendon, Sid Bream, Rich «Goose» Gossage y Bo Jackson? Que para 1994 estaban entregando sus últimos suspiros de vida beisbolistica en diferentes equipos, nunca supieron cual sería su último partido en las Mayores, no vivieron la sensación en el cuerpo de saber que se uniformaban por última vez, y tampoco la de anunciar su retiro de forma oficial.
«Yo nunca anuncié mi retiro. Inclusive hoy mas de veinte años después, sigo sin anunciarlo» –»Gosse» Gossage (22 años en las mayores e integrante del Salón de la Fama).
La huelga les tomó de sorpresa porque sabían que el momento de parar llegaría, recogieron sus guantes y bats el 11 de agosto con la esperanza de volverlos a utilizar en setiembre. Pero ésto nunca sucedió, sus carreras en lugar de terminar en el campo concluyeron en un escritorio. Para cuando se resolvió la disputa, 232 días después del inicio del lockout, ellos ya eran ex-jugadores.