El campeonato AMA Supercross, an FIM World Championship llegaba a su ecuador aproximado con la cita en el Edward Jones Dome de St. Louis. Si Davi Millsaps conseguía salir con más de 25 puntos de ventaja a falta de ocho citas pensar en el título del piloto del noreste no sería una tontería. La final se vio interrumpida tras tres vueltas por un accidente de Kyle Chisholm y, como manda el reglamento, se reinició con una salida en fila de uno.
En la segunda salida, el orden era James Stewart, Justin Barcia, Mike Alessi, Chad Reed, Bobby Kiniry, Ryan Villopoto (con tres puestos de penalización), Ryan Dungey, Andrew Short, Weston Peick y Davi Millsaps cerraba el top10 con Trey Canard en el furgón de cola. La resalida fue limpia y, pese a salir en fila de uno, Alessi consiguió superar a Barcia en la vuelta inicial pero «Bam Bam» le devolvió el adelantamiento y de ahí en adelante el #800 empezó a decaer.
Con el paso de las vueltas, «Villo» fue escalando puestos mientras el resto de pilotos seguía bastante en sus posiciones. La otra remontada destacable era la del líder del campeonato, que poco a poco se fue acercando al top 5.
A media carrera se desarrolló un duelo entre «Stewy» y RV que se resolvió con uno de los adelantamientos más controvertidos de la historia del supercross. Ante una zona con banderas médicas (prohibido saltar y adelantar), Villopoto se acercó a JS7 y, en una zona con banderas amarillas (circular con precaución), le adelantó mientras Stewart rodaba tranquilo por estar en zona de peligro.
Tras un par de horas de reclamaciones, Ryan Villopoto consiguió su cuarta victoria de la temporada y recorto diez puntos a Davi Millsaps, que terminó sexto. El podio lo completaron James Stewart y Chad Reed con Ryan Dungey, Justin Barcia, el propio Millsaps, Mike Alessi, Trey Canard y Justin Brayton completando el top10.
Diez puntos separan a los dos pilotos que lideran la general y llega la prueba más complicada del calendario: el Supercross de Daytona. El circuito será más largo, más rápido, más duro físicamente, terreno más blando y no hay techo. Hacer predicciones es una quimera pero es seguro que el campeonato puede cambiar y mucho.