El AMA supercross, an FIM World Championship llegó al Georgia Dome de Atlanta con un Davi Millsaps fuerte pero no invencible. El piloto de Suzuki-Rockstar vio cómo Ryan Villopoto le quitó tres puntos en la última final en Texas. Más atrás en el campeonato la mayor noticia era que Chad Reed estaba empezando a quedarse algo descartado para el título como ya estaban Justin Barcia y James Stewart. Por otro lado esta semana hubo dos pilotos que cambiaron de moto: Andrew Short se pasó a KTM-BTO motorsports, Kyle Chisholm empezó a sustituir a Josh Grant en Yamaha-JGR y Eli Tomac debutó en el Campeonato mundial al pasarse a una CRF 450 temporalmente.
El holeshot de la final se lo llevó por primera vez en más de doce meses James Stewart. Justo por detrás se colocaron Villopoto, Jake Weimer, Mike Alessi y Millsaps. Los más perjudicados tras la salida fueron Reed (10º), Dungey (11º) y Tomac (12º).
El diseño del circuito no favorecía en absoluto al desarrollo de la acción y la carrera se transformó en lo que los americanos llaman una «snoozer» (literalmente «roncadora», una carrera para echarte a dormir) con muy pocos adelantamientos. Lo más destacado fue la caída por la clasificación de la pareja Weimer-Alessi, que fueron adelantados por Millsaps, «Bam Bam», TC41, RD5 y ET17. CR22 decepcionó al sólo ser capaz de pasar a uno de ellos.
Tras las veinte vueltas de la final, James Stewart venció por primera vez en 2013 con Ryan Villopoto y Davi Millsaps completando el podio. Justin Barcia, Trey Canard, Ryan Dungey, Eli Tomac, Jake Weimer, Chad Reed y Mike Alessi. Subrayar que Andrew Short terminó decimocuarto en su debut con la KTM por el duodécimo puesto de su nuevo compañero, Matt Goerke.
El campeonato llega el fin de semana al Edwards Jones Dome de St. Louis. Davi Millsaps llega con un colchón todavía amplio en la general. La carrera en Missouri marca la mitad de campeonato y salir con una diferencia de puntos mayor a veinticinco sobre el segundo del campeonato podría significar un golpe moral muy duro.