Tras una final en Anaheim algo agitada, en Phoenix se buscaba ver el verdadero ritmo y orientación del campeonato. En los momentos previos se confirmó la lesión de Josh Hill. Aunque ya recuperado de su conmoción cerebral, el mayor de los Hill estaría fuera por tres semanas por la lesión en su mano.
La doble curva a izquierda de salida provocó caos en la final. Mientras Justin Barcia conseguía el holeshot, hasta cinco pilotos se cayeron o salieron de pista. El piloto más destacable de los perjudicados fue Ryan Dungey, que pasó por meta 16º tras la primera vuelta.
Ryan Villopoto cayó en las primeras vueltas, perdiendo unos cinco segundos y un par de posiciones. Detrás de JB se formó un grupo integrado por Davi Millsaps, Chad Reed, Trey Canard y Jake Weimer. El dolorido James Stewart se mantuvo conservador durante toda la carrera, simplemente intentando completar las 20 vueltas de la mejor manera posible.
El actual campeón remontó y acabó contactando con el grupo. Rápidamente adelantó a su compañero Jake Weimer y poco a poco acabó adelantando a todos hasta quedarse tercero tras TC41 a falta de una vuelta. El privado Millsaps volvió a mostrar buena velocidad y se mantuvo por delante de la Honda semi-oficial de CR22. Fuera de cámara, RD5 remontó poco a poco sin arriesgar en exceso tras su percance en la vuelta inicial.
En la última vuelta Canard resbaló rodando bajo presión del piloto de Washington, perdiendo puntos en la última vuelta por segunda vez consecutiva. Finalmente, Justin Barcia venció holgadamente por delante de Ryan Villopoto y Davi Millsaps. Chad Reed, Trey Canard, Jake Weimer, James Stewart, Ryan Dungey, Andrew Short y Josh Grant completaron el top10.