Esta temporada a NASCAR le está sentando muy bien los parones por lluvia en sus carreras. En Daytona ya pudimos vivir un paro de varias horas a causa de la meteorología recompensado con mucha acción en pista en la reanudación. Y ayer, tras una espera de más de 3 horas por lluvia, se volvió a repetir la misma situación en el coliseo romano de NASCAR, el Bristol Motorspeedway,
La carrera empezaba con un Denny Hamlin que consiguio la Pole el Viernes, aunque su puesto rapidamente fue arrebatado en la vuelta número tres por Brad Keselowski. Un liderato que duró hasta la vuelta 50, donde apareció la primera bandera amarilla, determinada por competición, para revisar el estado de los neumáticos.
Tras otra serie de paradas por banderas amarillas, Jimmie Johnson alcanzó la primera posición y no la dejó hasta la vuelta número 100 donde un Travis Kvapil doblado molestó al 48 en la parte de arriba para que Matt Kenseth por la parte de abajo adelantara sin mayor dificultad. Para rematar la mala suerte, Johnson pinchó su rueda delantera derecha y tuvo que controlar el coche hasta boxes, donde perdió varias vueltas con el líder.
En la vuelta 119 y a causa de ligera llovizna, salió la cuarta bandera amarilla para poco después en la vuelta 125 se parara la carrera. Bandera roja, carrera detenida y los mecanicos tuvieron que cubrir los autos sin poder realizar ajustes tecnico marcados por reglamento.
Tras el parón de más de tres horas, la carrera se reanudó con un Kenseth muy fuerte que solo era intimidado por Kurt Busch. Pero en la vuelta 156, la situación cambió cuando Kenseth fue golpeado por detras por el novato Timmy Hill, que no frenó a tiempo a causa de una bandera amarilla en pista. Un error de novato que parecía costarle la carrera a Kenseth. Nada más lejos de la realidad. Tras un paso por boxes para solucionar los desperfectos en la parte trasera, Kenseth se lanzó a una remontada increible que le llevó al liderato de nuevo en la vuelta 285.
La carrera parecía controlada por un Kenseth, que tuvo un bonito duelo con el novato Kyle Larson por el liderato durante algunas vueltas. Pero estaba claro que no iba a ser el día de Matt. Un juego de neumáticos defectuoso mandó al 20 contra el muro en la vuelta 411. Aunque pudo seguir en carrera, su coche ya tenía daños muy severos como para seguir luchando arriba.
A partir de ese momento, un escuadrón de Fords tomó el mando de la carrera comandado por un Carl Edwards que no paró a repostar durante una caution provocada por trompo de Martin Truex Jr. Detrás de él se colocaron un sorprendente Aric Almirola con el 43 de Petty y el compañero de Edwards en Roush, Ricky Stenhouse Jr.
De aquí al final fueron estos tres pilotos los que pelearon con la victoria. Una victoria que acabó decantándose finalmente para Edwards, cuando a 3 vueltas del final los comisarios decidieron dar por finalizada la carrera, por el regreso de la lluvia a pista.
Stenhouse, Almirola, Stewart, Ambrose,Hamlin, Gordon, Kahne, Vickers y el novato Larson completaron el top 10.
Día para olvidar para los líderes del campeonato Dale Earnhardt Jr. y Brad Keselowski que sufrieron varios problemas a lo largo de la carrera, al igual que el actual campeón Jimmie Johnson.
Como anécdota cabe destacar que antes del comienzo de carrera, los encargados de recitar el mitico «Gentlemen start your engines» fueron los entrenadores de College Football Frank Beamer y Butch Jones, de Virginia Tech Hokies y Tennessee Vols respectivamente. Ambos equipos jugarán un partido el 10 de Septiembre de 2016 en este mismo circuito, un duelo llamado «La batalla de Bristol», donde se esperan 160.000 aficionados, lo que sería un récord de asistencia para la NCAA.
Para la carrera del próximo domingo, NASCAR se traslada de nuevo a la otra punta del pais. Concretamente a California, al rápido oval de Fontana, Auto Club Speedway.