Además de las tres finales a 10 vueltas, la tercera edición de la Monster Energy Cup nos ofreció hasta cuatro competiciones extras: dos carreras para pilotos amateurs en motos «lites», dos carreras para chavales en «superminis», una mini-carrera monocopa para críos y un concurso de whips con jueces bastante serios.
En la competición de Amateur All-Stars se llevó la victoria RJ Hampshire (1-3) tras luchar bien duro por remontar en la segunda manga, quizá le veamos como profesional dentro de Honda-GEICO en unos diez meses o para el AMA Supercross de 2015. Zachary Commans (5-4) fue bastante regular, el futuro piloto Kawasaki-Pro circuit optó por la madurez a la velocidad para ser segundo. El compañero de RJ, Jordon Smith (9-1) completó el podio tras una muy mala primera manga. Decepcionaron los futuros pilotos de KTM y Yamaha y resultó curioso que el único futuro piloto de Suzuki participante irá parar a Suzuki-RCH, un equipo no del todo oficial hoy en día. El mejor amateur fue únicamente algo menos de tres segundos más lento por vuelta que el mejor tiempo de la noche, hecho por James Stewart.
Al igual que la primera edición con las Superminis (motos con motores de 110 centímetros cúbicos dos tiempos) hubo «el show de Cianciarulo», esta vez fue «el show de Forkner». Austin Forkner (1-1) dominó con claridad ante Chase Sexton (3-3) y Michael Mosiman. Destacar que las cinco marcas representadas se colaron en el top 6 y que Mosiman llegó a ser sólamente siete segundos y medio más lento que el tiempo record de JS7.
El ganador del KTM Junior Supercross Challenge, prueba debutante en esto de la Monster Energy Cup, fue el pequeñín Matt Leblanc. El chaval se ganó de premio una KTM 50 SX al batir a Jordan Biese y a Liam Everts (sí, Everts como las leyendas Harry Everts y Stefan Everts, Liam es hijo del diez veces Campeón del Mundo de Motocross). El hijo de Tim Ferry, Evan, también compitió pero estuvo flojito y acabó undécimo de 14 participantes.
La final del Dirt shark Best Whip se disputó en un formato de carrusel y ante un panel de jueces con más o menos conocimiento sobre el espectáculo y hacer trucos. A los cuatro medallistas de oro de los X-Games (Jeremy Stenberg, Josh Hansen, Edgar Torronteras y Todd Potter) se les unieron Tom Parsons, el ex-corredor Billy Laninovich y Jarryd McNeill. Los jueces parece que valoraron la combinación de amplitud, variedad y espectáculo y en ello el mejor fue el casi desconocido Parsons por delante de Torronteras y McNeill. Curioso y a la vez encantador fue ver que «Twitch», si valorado por los jueces y no por su número de fans, queda último al luchar contra los mejores.