Si no sois aficionados habituales o si vuestra relación con este gran deporte acaba de empezar, quizás no conozcáis a Joe Silva. Es ese hombre pequeñito con perilla que entra el primero en el octógono para felicitar al ganador, el que se mantiene en un segundo plano durante los pesajes apuntando datos y además es el matchmaker de UFC, el que decide los combates. Aunque la decisión final es consensuada entre Dana White y Silva, la primera decisión es del «hombre invisible». Las entrevistas que ha concedido a los medios se pueden contar con los dedos de una mano y no le gusta llamar la atención, de eso ya se encarga White. El caso es que en muchas ocasiones se ha criticado con dureza las decisiones de Silva diciendo que eran combates muy previsibles y que no realizaba bien su trabajo. En especial se criticó mucho los dos carteles anteriores preparados para FOX y que no cumplieron las expectativas de los fans. Tras el evento del sábado Silva ha subido muchos enteros como matchmaker ya que las cuatro peleas emitidas en abierto fueron un rotundo éxito.
Aun así los índices de audiencia no fueron buenos por mucho que Zuffa y la propia FOX se muestren complacidos con el numero de espectadores. Las peleas de FOX están destinadas a un público novato, que quizás nunca ha visto MMA y por ello deberían estar enfocadas de forma distinta a los eventos habituales de UFC. Las andanzas en FOX comenzaron con un campeonato de peso pesado, una excelente elección para todo el mundo pero que no dejó ver lo bonito que es este deporte ya que el combate solo duró 64 segundos y a esto tenemos que unir la horrible decisión de solo emitir esa pelea. Para UFC on FOX 2 los protagonistas fueron Rashad Evans y Phil Davis, nombres desconocidos para los nuevos y un combate que se presumía aburrido por ser los dos hombres wrestlers. Y así fue, combate sin emoción y un evento en el que solo el trash-talk de Chael Sonnen sacó al de jugo.
Para esta última edición Jim Miller y Nate Diaz fueron los elegidos. Ya sabíamos que iba a ser una gran pelea, pero ¿lo sabían los demás? Mucha gente solo conoce a Nate Diaz por ser el hermano menor de Nick y a este lo conocen por sus polémicas mas que por sus victorias. No me entendáis mal, el evento fue una maravilla, desde el primer combate hasta la sumisión de Diaz pero veremos como se refleja esto en número de espectadores para los futuros UFC. Sin duda debería haber un incremento considerable visto el espectáculo del sábado pero ¿por qué no hacer las cosas de otra forma? Si realmente la idea de los UFC on FOX es educar, enganchar y conseguir nuevos fans ofrezcamos nombres y caras conocidas. Pongamos toda la carne en el asador con gente como Jon Jones, Chael Sonnen o el último combate de Tito Ortiz, luchadores que conozca la gente aunque sea de oídas y así se creerá una nueva base de fans estable dispuesta a gastarse su dinero cada dos o tres semanas en los eventos PPV. Veremos como enfoca el futuro Zuffa ya que parece claro que habrá cambios de aquí a finales de año respecto a los eventos gratuitos y en abierto.
Y ahora centrémonos en las peleas del sábado. Sin duda el mayor ganador de la noche fue Nate Diaz que brindó otro recital al público, incluidas sus habituales provocaciones al rival algo a lo que, desgraciadamente, ya nos hemos acostumbrado. Las oportunidades de Miller de llevarse la victoria se esfumaron en el momento en que empezó a seguir el juego a Diaz, si hubiese seguido manteniendo las distancias con patadas bajas y golpes rápidos cortando las distancias podría haber roto la estrategia de Nate. Pero el de Stockton empezó a sentirse muy cómodo en el octógono y conectaba los golpes sin problemas, Miller recibió mucho castigo y al final del segundo round Diaz lo sometió via guillotine-choke, la primera vez que alguien finalizaba a Miller. Tras el evento Dana White anunció que Nate se enfrentará al ganador del duelo entre Benson Henderson y Frankie Edgar por el campeonato ligero. Por cierto, la educación y el saber que tiene Jim Miller parece mención aparte, un guerrero de los pies a la cabeza.
De los otro tres combates lo mas sorprendente fue la victoria de Belcher ante Palhares tras defenderse con uñas y dientes de los intentos de sumisión del brasileño. ‘Toquinho’ se ha convertido en un luchador predecible pero tremendamente efectivo, todo el mundo sabía que iba a buscar el derribo y después el heel-hook. Pero Belcher cambió la situación y se vio encima del brasileño para finalizarlo a base de codazos. Gran victoria del americano que sube puestos en peso medio y aun con mas mérito tras su operación de retina que estuvo a punto de dejarle fuera de combatir de nuevo.
Entrando ya en opiniones personales me da mucha pena la derrota de Pat Barry ante Johnson. Se podrá criticar a Barry de muchas cosas pero nunca se le podrá echar en cara que no dejé el alma cada vez que entra en la jaula. Esperemos que se tome un descanso y vuelva con mas fuerza porque su futuro peligra en UFC. En cambio ver perder a Koscheck es algo que dibuja una sonrisa en mi cara, una persona irrespetuosa, maleducada y prepotente que hace pocas semanas deseó que George St Pierre, quien le derrotó en dos ocasiones por cierto, no se recuperará de su grave lesión. Que mas puedo decir, este personaje se retrata el solo. La semana que viene Korean Zombie contra Poirier, peleón.