El pasado domingo por la noche los Red Wings entraron en la historia de la NHL tras igualar el número de victorias conseguidas de forma consecutiva como local. Fue en un partido muy igualado y competitivo ante los Flyers donde un gol de Johan Franzen, en eltercer periodo del partido, le hizo sumar dos puntos más a la franquicia de Michigan. Los de Philadelphia ya hicieron lo propio en la temporada 75-76 al igual que los Bruins en la 29-30.
Pero esta pasada madrugada el mundo del Hockey puso todos sus ojos en el Joe Louis Arena para ver si el conjunto de Detroit era capaz de sumar su vigésimo primera victoria consecutiva de la temporada en su hielo y conseguir establecer la mejor marca de la historia en la NHL. Los de Mike Babcock no desaprovecharon la oportunidad y vencieron por un cómodo 1-3 en un partido que controlaron de principio a fin. Zetterberg y Stuart marcaban los dos primeros goles del partido en el primer periodo, Jiri Hutler sentenciaba en el tercero, mientras que Burish a pocos minutos para el final maquillaba el resultado para los tejanos dejando sin shutout a Joey MacDonald. Sin duda alguna tanto él como Ty Conklin han sabido suplir a la perfección la baja por lesión de Jimmy Howard. Es posible que el meta sueco esté de vuelta este viernes en casa donde su equipo jugará contra los Preds para intentar ampliar su marca a 22 victorias.
Son ya un total de 105 días los que llevan los Wings sin conocer la derrota en su feudo, en concreto tras caer este curso contra los Flames el pasado 3 de noviembre. Pero a pesar de estos magníficos números como lo local (23-2-1), están en plena lucha por hacerse con el título de división. Los Blues de Hitchcock están dando mucha guerra y aunque están cinco puntos por debajo de los de los de Michigan llevan disputados dos encuentros menos y en casa tienen unos registros que pueden llegar a ser incluso mejores que los de sus compañeros de la Central (24-3-4) a final de temporada.
Lo que está claro es que los demás equipos de la conferencia deberán buscar la pócima para hacer vulnerables a estas dos franquicias de cara a los playoffs y todavía queda por ver hasta donde son capaces los Red Wings de establecer el récord.