Otro año, y van ya no sé cuantos, se puede decir que la SEC fue la mejor conferencia en la temporada 2010, contando entre muchos otros con el equipo ganador del BCS Championship Game, los Auburn Tigers. Pero esta tendencia tiene visos de cambiar, y es que tanto Auburn como el resto de equipos punteros de la conferencia han perdido muchos jugadores importantes en el pasado draft, algo que no ha pasado en otros equipos, así que en las previas la SEC parte en desventaja. Pese a todo, también parecía que el año pasado la marcha de Tebow iba a hundir el nivel de la conferencia pero lo único que hundió fue a Florida, así que con un poco de suerte el nivel global de la SEC no va a decaer esta temporada.`
Lo que dejó 2010
- BCS Championship: Auburn 22 Oregon 19
- Sugar: Ohio State 31 Arkansas 26
- Cotton: LSU 41 Texas A&M 24
- Gator: Mississippi St. 52 Michigan 14
- Capital One: Alabama 49 Michigan St. 7
- Outback: Florida 37 Penn St. 24
- Chick-fil-A: Florida St. 26 South Carolina 17
- Liberty: UCF 10 Georgia 6
- Music City: North Carolina 30 Tennessee 27
Previa 2011
Empezamos por la División Oeste y tal y como hemos adelantado en la introducción, muchos son los equipos que han perdido jugadores importantes en el último draft. Los principales afectados quizá hayan sido los Auburn Tigers, vigentes campeones de la NCAA, que han perdido en Cam Newton y Nick Fairley a sus piedras angulares ofensiva y defensiva; aun así los Tigers quieren seguir siendo competitivos confiando totalmente su ataque a Michael Dyer, un corredor sophomore que ya dejó buenos detalles en el último tramo de temporada. Pero no son los únicos que han perdido piezas importantes, el draft ha hecho al menos el mismo daño (y probablemente más a nivel absoluto) a los Alabama Crimson Tide, que han perdido a Greg McElroy, Mark Ingram y Julio Jones en ataque y a Marcell Dareus en defensa. Casi nada. La ventaja de Alabama es que, al ser un programa más establecido y con una campaña de reclutamiento más potente, el draft no les hace tanto daño a nivel relativo puesto que gente como Trent Richardson o AJ McCarron (de quien se espera que gane la batalla posicional por el puesto de QB) ya está preparada para ser líderes en el equipo. Otro equipo con pérdidas clave van a ser los Arkansas Razorbacks, que ven como el draft les ha dejado sin Ryan Mallett y Niles Paul, y que una lesión de larga duración también les ha quitado del equipo al corredor Knile Davis para toda la temporada. Esto tendrá que dejar las riendas del equipo en manos de los inexpertos Tyler Wilson y Ronnie Wingo, algo que no parece augurar muy buenos resultados para Arkansas esta temporada. Para no ser menos, también LSU ha resultado damnificada por el draft al perder en Patrick Peterson, su mejor jugador defensivo, y en Stevan Ridley en uno de sus referentes en ataque, pero al igual que Alabama tiene un programa de reclutamiento lo suficientemente fuerte como para que estas bajas no se noten en exceso. Con tanta baja suelta quizá el equipo tapado sea el de Mississippi State, que sólo pierde a Derek Sherrod como jugador destacado y que el año pasado ya tuvo una temporada sorprendente al quedar 8-4 y ganar la Gator Bowl ante Michigan. Por último queda hablar de Ole Miss que, después de la chapuza con Jeremiah Masoli, encaran una temporada en la que no se sabe muy bien qué esperar de ellos, si el resultado final es malo puede significar el despido del entrenador Houston Nutt y eso siempre puede funcionar un incentivo para el equipo.
En la División Este las cosas son bastante más fáciles. South Carolina ganó la división el año pasado y no ha perdido a nadie importante, en especial en el lado ofensivo del balón, por lo que se les ha colgado la etiqueta de favoritos. Desde luego si Alshon Jeffery y Marcus Lattimore rinden al nivel de la temporada pasada poco van a poder hacer los otros equipos de la división. Empezando por los Florida Gators, que desde que se fuera Tim Tebow no saben ni qué quieren ni a qué juegan y tampoco parece que lo vayan a descubrir en breve. La novedad este año es la sustitución parece que definitiva de Urban Meyer por el tándem formado por Charlie Weis y Will Muschamp (por este orden), pero las cosas no parecen variar mucho más que de eso. De momento aún no se han decidido acerca de si volver a poner a John Brantley como quarterback titular o dar más snaps a jugadores como Trey Burton y tampoco saben si confiar el puesto de corredor titular a Jeff Demps o a Mike Gillislee. Y por si esto fuera poco, recientemente se han visto «obligados» a despedir a Janoris Jenkins (posteriormente transferido a North Alabama), estrella defensiva del equipo, por un problema de posesión de marihuana. Aun así, son los Gators y pueden hacerle un roto a cualquiera a poco que se lo propongan, así que habrá que vigilarles de cerca. Quienes sí parece que han encarado mejor su reconstrucción son los Georgia Bulldogs que, después de haber perdido a AJ Green, parece que puede pasar la página del equipo del casiéxito de 2008 (que formaba el propio Green con Matt Stafford y Knowshon Moreno) y empezar de nuevo. Y lo hacen bajo el mando de Aaron Murray, un quarterback sophomore que parece haber crecido mucho durante esta offseason y al que se ve totalmente capacitado para liderar al equipo. Aun así, ninguno de estos equipos se puede considerar como el tapado, algo que sí puede decirse de los Tennessee Volunteers, un equipo que descubrió a Tyler Bray en la recta final de la temporada y que, si tienen algo más de suerte en sus partidos ajustados (como el que perdieron ante LSU), puede que den una sorpresa a más de uno. Y hasta aquí los equipos con alguna aspiración puesto que ni Kentucky ni Vanderbilt se espera que sean medianamente competitivos. Los primeros, los Kentucky Wildcats, es improbable que hagan nada porque tanto Randall Cobb como Derrick Locke han marchado a la NFL, y entre ambos constituían el 90% de un ataque que ya la temporada pasada era tirando a flojito. Los Vanderbilt Commodores, por su lado, no se prevée que hagan absolutamente nada porque desde que Jay Cutler abandonara la universidad ni tan siquiera se asoman por las posiciones de cabeza de la división.
Jugadores a observar
- QB Aaron Murray, Georgia: Pocket passer como pocos en la NCAA. Quizá no tenga el tamaño ideal para un pasador pero de él destaca su velocidad en la lectura y su buena toma de decisiones. Además tiene muy buena presencia en el pocket y tiene capacidad para salir de él y lanzar en movimiento. Capaz de liderar él solo a su equipo a lo largo de toda la temporada incluso si no tiene demasiada ayuda externa.
- RB Marcus Lattimore, South Carolina: El mejor corredor en la SEC y uno de los tres mejores de toda la NCAA, tiene una mezcla de potenica y velocidad que le hace único. El año pasado, como freshman, marcó el récord de yardas de carrera para un novato y el récord de touchdowns de carrera en una temporada en la historia de la universidad. Da miedo lo que puede llegar a hacer con un año más de experiencia y el mismo equipo rodeándole.
- RB Michael Dyer, Auburn: Pese a ser tercero en el depth chart de los Tigers al empezar la temporada pasada, consiguió escalar puestos hasta ser el titular en diciembre, incluso lo fue en el BCS Championship Game (en el que fue el MVP por delante del mismísimo Cam Newton). Corredor más ágil que potente, tendrá que demostrar que puede generar juego por sí solo ahora que el equipo no tiene otras armas ofensivas que le ayuden.
- RB Trent Richardson, Alabama: Uno de los jugadores más codiciados cuando salió de high school en 2009, no ha despuntado hasta ahora porque ha estado estas dos temporadas compartiendo backfield con Mark Ingram, o lo que vendría a ser lo mismo, a su sombra. Una vez Ingram ha marchado a la NFL, Richardson tendrá que asumir el rol de corredor principal, tiene talento de sobra para hacerlo y conoce el sistema perfectamente así que las probabilidades de éxito son muy altas.
- WR Alshon Jeffery, South Carolina: Con la marcha de AJ Green y Julio Jones, Jeffery se convierte indiscutiblemente en el mejor receptor de la SEC. Es un receptor completo, con un tamaño excepcional que le convierte en un arma muy peligrosa en la red zone pero que también posee una agilidad tremenda que le permite convertir recpeciones cortas en touchdowns. Se le ha comparado en más de una ocasión con Calvin Johnson.
- LB Danny Trevathan, Kentucky: Pese a pertenecer a una de las peores defensas y, en especial, a una de las peores defensas contra la carrera, Trevathan es un linebacker excepcional. Combina su instinto y su velocidad para estar cerca del balón en la mayoría de jugadas, lo que le hace promediar más de 10 placajes por partido. Además, tiene una técnica de placaje bastante buena a la que añade una habilidad especial para forzar fumbles.
- S Mark Barron, Alabama: Se ha mostrado como un auténtico playmaker en la secundaria, capaz de cambiar un partido con una intercepción, una deflección o simplemente anulando a receptores con su sola presencia en la zona. Este año tiene que ser el que tiene que demostrar lo que es realmente, puesto que no tendrá la ayuda en el pass-rush de gente como Terrence Cody o Marcell Dareus, algo que sin duda le facilitaba enormemente el trabajo.
Predicción
Universidad | Sportsmadeinusa | Athlon |
South Carolina | 10-2 | 8-4 (4-4) |
Georgia | 9-3 | 10-3 (7-1) |
Tennessee | 7-5 | 6-6 (2-6) |
Florida | 7-5 | 9-3 (6-2) |
Kentucky | 5-7 | 6-6 (2-6) |
Vanderbilt | 2-10 | 3-9 (1-7) |
Alabama | 11-1 | 13-0 (8-0) |
LSU | 10-2 | 10-2 (6-2) |
Auburn | 8-4 | 6-6 (2-6) |
Mississippi State | 8-4 | 7-5 (3-5) |
Arkansas | 5-7 | 9-3 (6-2) |
Ole Miss | 4-8 | 5-7 (1-7) |