Quien nos diría en 2011 que este entrenador con herencia latina estaría en la baraja para llevarse el premio al entrenador del año del 2013.
Ron Rivera llegó a Carolina en 2011 desde San Diego donde ejerció como Defensive Coordinator desde el 2008 al 2010. Rivera, quien reemplazó a John Fox, actual entrenador de los Denver Broncos, ya mejoró los números de la franquicia en sus dos primeros años frente a los logrados por Fox que terminó con un triste récord de 2-14.
Este era su primer trabajo como Head Coach en la NFL, el segundo latino en la liga siguiendo los pasos del entrenador de Oakland Tom Flores ganador de dos AFC Championship con los de la costa oeste.
Y es que experiencia y logros no le faltan. Rivera ganó el Super Bowl con los Bears de Chicago en 1985 como linebacker, y en 2007 como coordinador defensivo, el equipo llegó al Super Bowl que perdieron por 29-17 ante los Colts de Indianápolis.
Ya en 2011 se ganó el puesto de Head Coach frente a Perry Fewell, de los Giants de Nueva York, Greg Manusky, de los 49ers de San Francisco y Rob Ryan, de los Browns de Cleveland, todos coordinadores defensivos: «me tranquiliza el hecho de que fue jugador», declaró el dueño de los Panthers. «Trae un enfoque y una trayectoria profesional que creemos se presta al éxito para nuestra organización y equipo de fútbol estadounidense».
Los primeros años fueron ya mejores que los últimos de Fox en la franquicia. Seis victorias en la temporada regular con un equipo totalmente en reconstrucción le valieron para aguantar como Head Coach, aun sin que se dudara de su valía para ser el máximo responsable de los Panthers, muchas voces críticas pedían su despido, aunque fue ratificado para la temporada 2013.
La historia de éxito de Ron Rivera está ligada a la aparición de Cam Newton en Carolina. Vino en el mismo año que su entrenador y la franquicia rápidamente le nombro su buque insignia.
Cameron ha madurado mucho este año. Ya sus estadísticas de los años de rookie y sophomore fueron muy buenas, llegando a ratings de pase del 84.5 y 86.2 respectivamente. El ganador del Heisman venía des ser el Rookie del año del 2011 y parecía que el equipo se le quedaba atrás, un quarterback ganador en un equipo que no aspiraba a nada.
Pero este año todo ha cambiado. Muchos analistas dicen que la evolución de Carolina va de la mano con la madurez de Cam Newton en este año. Un jugador más completo, hace que su juego ofensivo sea eficiente y eficaz, sin importarle tanto el anotar sus touchdowns de carrera y si en ganar los partidos, su rating es superior al 90.
Pero esto no solo es por la madurez de Cam, que en algo tendrá que ver su entrenador, sino el trabajo con su defensa. Ahora mismo con un 8-3 de victorias/derrotas los de Charlotte son el tercer equipo que permite menos yardas en defensa en la NFL y el que menos puntos permite de toda la liga con tan solo 13.7 puntos por partido.
Jugadores como Greg Hardy, Thomas Davis, Mike Mitchell hacen un grupo duro en defensa que no permiten juego aéreo ni juego por tierra. Jugar en Charlotte es un infierno para casi todos los quarterbacks y running back. Hasta Tom Brady con los Patriots al 100% en ataque,solo marcaron 20 puntos en el Bank of America Stadium en la penúltima jornada. Y cuando juegan fuera de casa, como este domingo, son capaces de dejar a los Dolphins en los dos últimos cuartos en cero puntos, remontando un partido que parecía perdido.
Este año ya llevan una victoria más que en todo el año pasado, y están segundos tras los Saints en su división siendo firmes candidatos para los Playoffs.
Hasta esta jornada, Rivera es uno de los entrenadores candidatos a ganar el premio al Head Coach del año tras Andy Reid, entrenador de Kansas City Chiefs. En declaraciones al The Charlotte Observer por este galardón, Rivera comentó que no le importaba nada de nada ese premio.