Rex Grossman comete errores pero, de momento, es el mejor fit para la posición de quarterback en Washington Redskins. Porque entre él y John Beck parece que es la mejor opción para el head coach Mike Shanahan.
El puesto de quarterback está siendo un grave problema par el equipo capitalino esta temporada, ninguno de los dos pasadores ha sido capaz de coger el liderato de un conjunto que llegó a estar 3-1 en el balance de las clasificaciones, y para muchos parecía una casualidad, porque los hechos han llevado a la realidad a los ‘Skins que han perdido cinco partidos consecutivos y se encuentran últimos de la AFC Este con 3-6.
Grossman fue nombrado titular en la offseason por un Shanahan que confío en ambos jugadores, uno veterano y otro sin apenas experiencia en la NFL, como sus quartebacks para toda la temporada sin buscar un jugador de más nombre o calidad. Aunque el primero cumplió levemente en las primeras cuatro semanas por las tres victorias de Washington, llegó la semana 6 contra los Eagles y completó 9 pases de 22 con 4 intercepciones. Fue sustituido en ese partido por Beck y a la semana siguiente este tomó el puesto de starter.
El ex de BYU ha durado tres semanas en el puesto porque el veterano de 31 años volvió a la titularidad el domingo en Miami, eso sí, con 215 yardas y 2 intercepciones. Grossman acumula esta temporada unas estadísticas de 1.357 yardas, 57,1% de los pases completados, 6 TD y 11 INT, mientras que Beck de 858 yardas, 60,6% de los pases completados, 2 TD y 4 INT.
El huddle tiene más confianza en Grossman, así se demostró el domingo, pero el problema es que para ambos quarterbacks lleva mucho tiempo construir un drive porque no hay talento visible, no hay talento explosivo para ello. Todo lleva a mayor posibilidades de que ocurra un turnover, como en los casos que Grossman se fuerza, o que la secuencia acabe en field goal.