Después de despedazar lo que es el problema, vayamos a las preguntas que rodean al mundo del football y, en particular, a los aficionados a la NFL estos días en los que no se sabe si habrá acuerdo entre NFL y NFLPA antes del 4 de Marzo, día que expira el actual Acuerdo Laboral Colectivo o CBA.
¿Qué lado está forzando el problema?
En septiembre, cuando empezaba la temporada regular, se hablaba de los propietarios, especialmente una facción agresiva en la que se incluía a Robert Kraft (Patriots), Pat Bowlen (Broncos), Jerry Jones (Cowboys) y Jerry Richardson (Panthers). Los dueños están bastante unidos respecto al hecho de pedir más del 40% de los ingresos totales de la NFL porque creen que el riesgo que están tomando en sus negocios no es recompensado con los suficientes dólares. Aunque el problema lo están forzando ambas partes, porque la NFLPA, es decir, los jugadores, también creen justo recibir más dinero del 60% de los ingresos de la NFL, especialmente si se alarga la temporada regular a 18 partidos.
¿Por qué están tan disgustados los propietarios con el CBA que firmaron en 2006?
Muchos creen que el director ejecutivo de la NFLPA por entonces, Gene Upshaw, cogió en un momento débil al entonces comisionado de la NFL, Paul Tagliabue, que estaba ya buscando su retirada tras 17 años en el cargo y no quería ninguna pelea en sus últimos meses de mandato. Aquel CBA se aprobó por 30 votos a 2 para dos años después acordar los mismos dueños rescindir ese acuerdo dos años antes, es decir, ahora.
Propietarios vs Jugadores
En cierta manera los jugadores son compasivos por las demandas de sus dueños cuando estos dicen que «están tomando riesgos», pero al momento salen las voces de que «ellos son los que toman más riesgos porque exponen su cuerpo en un campo de football». Cada uno tira de su lado de la cuerda para pedir su porcentaje de dinero de los ingresos totales de la NFL y cada uno ofrece su propia propaganda de cifras y hechos. Por ejemplo, la NFLPA señala que los propietarios esconden muchos beneficios y piden demasiadas tasas nuevos, mientras que los empresarios dicen que la situación económica no es la mejor y ya no llegan tantos dólares a las arcas. Guerra de cifras.
Analizemos el problema lejos de hablar de football, como una mera situación económica y que valoren los lectores:
- Es el empresario contra el trabajador en tiempos de crisis donde el patrón recorta los derechos del obrero, ¿quién gana casi siempre? El jefe.
- De 2006 a 2009 los salarios de los jugadores han crecido un 9,4% mientras que las franquicias han aumentado su valor en un 16,2%
¿Quién tiene más las de ganar en caso de huelga?
Los propietarios. Son simples datos económicos, si no hay temporada de NFL las franquicias reducen sus gastos en torno al 50% (la mayoría de ese 50% son salarios de jugadores) y además siguen teniendo los ingresos de la televisión pese a que no haya partidos (este es un tema aún más complejo, las posibles demandas de las networks a NFL y NFLPA en caso de lockout, aunque la carta de las televisiones es la mejor herramienta de presión para los jugadores). Mientras, los jugadores sin un salario estarían mucho más estresados teniendo en cuenta que la carrera de un jugador como profesional no es muy larga, es un año de renta.
¿Puede llegar todo esto a los tribunales?
Sí, a los federales, en caso de que el Acuerdo Laboral Colectivo no llegue. El Tribunal Supremo es la última instancia. Sería muy difícil predecir el resultado de la disputa, además de que sería bastante larga, pero la NFLPA tiene algún punto a su favor después de la sentencia de mayo de 2010 que venía a decir que «la NFL no es un negocio, sino 32«.
¿Habría un paso anterior al Tribunal Supremo?
Sí. La NFL es el negocio deportivo más lucrativo de Estados Unidos y Washington no puede permitir que eso se venga abajo tal como está la situación económica del país. Los Estados Unidos de América es un sistema capitalista, por lo que no se contempla la intervención del estado, pero eso es la teoría; primero porque la administración Obama se ha mostrado claramente intervencionista en muchas facetas, especialmente la económica, y segundo el gobierno federal siempre interviene, de una manera u otra, engañando a esa ‘teoría capitalista’ que tanto defienden los convervadores. Si la mano del gobierno entra ahí para mediar no será directamente desde la Casa Blanca, llegarán directrices desde el despacho oval pero será el Capitolio quien maneje este asunto, los legisladores (senadores y congresistas), tal como se ha hecho toda la vida en DC. Además, la NFLPA tiene bastantes amigos en Capitol Hill.
¿Puede afectar la relación de Goodell y Smith en las negociaciones?
Sí. Roger Goodell, comisionado de la NFL, y DeMaurice Smith, director ejecutivo de la NFLPA, no empezaron con el pie derecho y carecen de química alguna para llevarse bien; no es tanto lo que se odian sino el ego que tienen. Goodell es una persona de mente esquemática que no le gusta moverse de los planes establecidos y Smith da la sensación que le gusta más soltar berborrea y tener las luces de las cámaras delante.
Consecuencias de que no haya acuerdo
El cierre, lockout. No hay temporada de NFL, no hay Super Bowl, no hay Madden, no hay fantasys, despidos de personal, no hay anuncios, no hay marketing, no se ficha a agentes libres, el draft 2011 queda devaluado, etc…hay muchas más pero enumerarlas una a una es como una puñalada a los aficionados al football; se apagaría una potente bombilla del país.
¿Los partidos de reserva son una opción?
Durante la huelga de 1987 se organizaron encuentros con jugadores «muy muy» suplentes y veteranos que volvían a ponerse las botas. Otra solución es que los jugadores creen sus propios equipos, es decir, los Chris Johnson’s vs los Tom Brady’s jugando en estadios alternativos (como los de fútbol) y que retransmiten los choques networks no asociadas a la NFL como la TBS. La tercera opción es la expansión de la UFL de la cual dicen las malas lenguas que se creó (en 2009) porque se tenía un potencial lockout en mente.