Rakeem Cato es el quarterback titular de los Thundering Herd de Marshall, college situado en el estado de West Virginia y que pertenece al ámbito de la Conference-USA desde 2005, tras haber estado en la MAC (Mid-American Conference) desde 1997. En las conversaciones por el Heisman que se producen todas las semanas al acabar la jornada de College, sale su nombre, en gran medida porque es un jugador muy completo en su posición, y tiene la capacidad de ser constante y aportar grandes números siempre. Quizás la mayor lacra de Rakeem Cato radica en que su equipo tiene un calendario de partidos muy sencillo y pueda conseguir mantenerse invicto durante toda la temporada. Eso hace que su stock de cara al Heisman se vea reducido ante los de otros jugadores en equipos con calendarios de mayor dificultad. Salvando las distancias, hablamos de Cato como el mayor exponente de las mid-major conferences, las conferencias de menor perfil que las 5 grandes. Cato ocupa el hueco dejado por Jordan Lynch, quarterback de Northern Illinois (equipo de la MAC), quien fue tercero en las votaciones del año pasado tras realizar una muy buena temporada en el ámbito del pase y una excelente temporada en el ámbito de carrera. Para más inri, los seguidores de los Marshall Thundering Herd ya han creado su propia campaña para que Rakeem Cato se postule como ganador al Heisman Trophy.
Sin embargo, Cato siempre se ha visto sometido a mucha presión desde su llegada a los Thundering Herd porque desde 2002 hasta su llegada, Marshall sólo tiene 2 temporadas con récord positivo (2003 y 2009) y no se consigue volver a la senda de la victoria hasta la llegada del quarterback procedente de Miami. Además es imposible evitar la comparación de Cato con anteriores quarterbacks de Marshall como Chad Pennington, quien ganó allí un Campeonato Nacional de la División I-AA (FCS ahora) en 1996 además de una temporada invicta y un Campeonato de la MAC en 1999 antes de ser drafteado en primera ronda por Miami un año después, o Byron Leftwich, quarterback sucesor de Pennington en el equipo y que también los condujo a 3 victorias consecutivas en Bowls (2000-2002) y a dos Campeonatos de la MAC en 2000 y 2002. Leftwich además fue nombrado mejor jugador ofensivo de la conferencia en 2001 y 2002 tras unas temporadas excelentes a nivel ofensivo. Estos jugadores, junto a Randy Moss (el receptor preferido de Pennington) dotaron a Marshall de muchos títulos, honores y reconocimientos además de dotar a la MAC de reconocimiento a nivel nacional.
Tras la marcha de estos jugadores, Marshall atravesó una época de sequía en el apartado de Bowls y de títulos de conferencia. Jugadores que pasaron por el equipo en esos momentos consiguieron ser drafteados y tener cierta importancia a nivel NFL como el runningback Ahmad Bradshaw (New York Giants e Indianapolis Colts) o el receptor Aaron Dobson (New England Patriots). Con eso y con todo, Rakeem Cato ha devuelto a Marshall a esa dinámica ganadora de principios de década venciendo dos Bowls, en 2011 contra Florida International y en 2013 contra los Terrapins de Maryland.
Pero, para conocer mejor al quarterback, tenemos que hablar de su historia personal, y de su pasado. Rakeem Cato viene del suburbio de Liberty City, en Miami. Cuando hablamos de Liberty City, hablamos de uno de los barrios más conflictivos de toda la ciudad. Su madre, Juanesse, murió cuando Rakeem tenía 13 años debido a la neumonía. Su padre, en la cárcel hasta que el chico tuviese 20 años. El pequeño Rakeem era el benjamín de ocho hermanos, y tuvo en su abuelo y en el football sus más grandes apoyos, ya que su madre era quien le motivaba y le instaba a cumplir sus labores escolares por delante de las deportivas.
Cato empezó su carrera de high school en Miami Springs, un programa titubeante y con muchas carencias, pero pronto decidió transferirse a una de las potencias estatales, Miami Central. Se trata de un high school con mucha tradición «footballística» y que ha tenido en sus filas a numerosísimos grandes jugadores tanto a nivel de college como de NFL. Allí entabló gran amistad con el receptor Tommy Shuler, con quien ya tenía contacto desde los 5 años. Shuler y Cato tienen una relación muy especial ya que Cato, debido a su situación familiar, tenía que quedarse muchas noches en casa de su compañero por distintos motivos ajenos a Rakeem. Eso fraguó una conexión muy especial que se sigue dando ahora, porque Tommy Shuler también es jugador de Marshall y uno de los objetivos preferidos de Cato, hasta el punto de conformar uno de los dúos QB-WR más imponentes y efectivos de la nación en estos momentos. En Miami Central lanza para más de 9.000 yardas y bate el récord del condado de Miami-Dade en dicho apartado, además de catapultar al equipo al campeonato estatal en 2011.
La competitividad y la decisión, además de la calidad técnica de Rakeem Cato llamaron la atención de Doc Holliday, head coach de la universidad de Marshall, quien desde 1980 hacía las funciones de ojeador para los equipos para los que trabajaba en esa zona (Liberty City). Holliday, durante su carrera como entrenador, ha firmado a más de 28 prospects procedentes de esa zona y de zonas aledañas pertenecientes a Florida. Cato, en su año freshman, consigue la titularidad con relativa facilidad, pero sus coaches consideraron que sentarle unos cuantos partidos le vendría bien, dado que tenía un temperamento difícil. La frustración formaba parte de su vida diaria debido a que le costó mucho liderar al equipo en su llegada a West Virginia. Sin embargo, el quedarse en el banquillo le vino bien y le fue devuelta la titularidad, liderando a Marshall en su victoria contra FIU en la Beef ‘O’ Brady’s Bowl por 20-10 para culminar su temporada freshman.
Pero sin embargo, su temporada sophomore fue la de su explosión a nivel nacional. Batió numerosos récords en la universidad y lideró a la nación en yardas de pase y pases completos, además de ser nombrado MVP de la conferencia. Como junior la tónica fue la misma. Estadísticamente realizó un temporadón, estableciendo el récord de pases de touchdown de la Universidad de Marshall en una sola temporada con 39, además de la victoria en la Military Bowl ante Maryland. Esta temporada, su última en college antes de realizar el tránsito a la NFL, está yendo sobre ruedas. 7 victorias en 7 partidos, todos ellos ganados por una diferencia de 15 o más puntos, e individualmente, manteniendo esa constancia que le caracteriza, además de batir récords cada semana.
Marshall’s Rakeem Cato breaks tie with @DangeRussWilson by throwing TD pass in his 39th consecutive game, longest streak in FBS history
— ESPN Stats & Info (@ESPNStatsInfo) octubre 18, 2014
Él, sin embargo, no quiere oír hablar de distinciones individuales como el Heisman Trophy. Tiene entre ceja y ceja brindarle un campeonato a Marshall y a su afición, la cual le apoya durante todos sus partidos en el Joan C. Edwards Stadium. También tiene personas a su lado como Chad Pennington o Aaron Dobson, ex jugadores de Marshall, con los que habla habitualmente y a los que pide consejo y ayuda a la hora de afrontar las situaciones. Probablemente no mucha gente haya oído hablar de Rakeem Cato, pero este quarterback se ha ganado el derecho a ser la esperanza de las conferencias pequeñas y las que no están a la luz de los focos para ganar el Heisman, y el derecho a estar en boca de todos por su juego, y por su historia.
https://www.youtube.com/watch?v=n05xRojLuao