Por Axel Andrés
Dios, que largo se está haciendo esto. Casi que vayamos al tajo que las introducciones ya no nos llevan a ningún sitio, y los jugadores casi que tampoco pero ya sólo quedan dos rondas, pero ni a mí me tendría que costar tanto escribir sobre ellos ni a vosotros leer el artículo, aunque si luego os olvidáis es perfectamente perdonable.
5 picks que me gustan
#171 – Arizona Cardinals
Quan Sturdivant (LB, North Carolina)
Sturdivant fue otro de los que se salvó de la quema en North Carolina, y precisamente por salvarse tuvo que multiplicarse durante toda la temporada para que las bajas de Robert Quinn y Marvin Austin se notaran lo mínimo posible. Y para lo bien que lo hizo es bastante sorprendente que acabara saliendo tan abajo en el draft. Arizona consigue con esta elección un linebacker cumplidor, con poca habilidad para cambiar un partido, pero que probablemente no desentone si juega un papel secundario en defensa (aunque sea titular). Sin que sirva de precedente, buen pick para los Cardinals.
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=8_S_ZUk-YKc[/youtube]
#198 – New York Giants
Tyler Sash (S, Iowa)
No entiendo cómo salieron 25 millones de safeties en el draft antes que éste, a quien muchos expertos consideraban uno de los mejores del draft (entre los que me incluyo, como experto, que de hecho tampoco lo soy tanto, bueno que también lo pensaba). Sash ha sido un pilar básico en la defensa de Iowa, un equipo que se ha puesto en el radar nacional en los últimos dos o tres años precisamente por su defensa rocosa, y que hayan salido bastantes safeties antes que él es algo desconcertante.. Un jugador sólido, que sabe defender bien tanto contra la carrera como contra el pase, además de un buen líder en el vestuario y en el campo, en Sash los Giants deberían encontrar lo que buscaban cuando draftearon a Chad Jones el año pasado, algo que por desgracia nunca llegaron a obtener.
#197 – Green Bay Packers
Ricky Elmore (OLB, Arizona)
Sí, ya estoy con los Packers otra vez, pues lo siento pero esta vez es justificado. A veces los expertos analistas que saben un huevo se pasan de listos, en especial a la hora de valorar a jugadores como Elmore. Para algunos es flojo, para algunos es lento, para algunos tiene poco repertorio de movimientos, el caso es intentar justificar la etiqueta que quieren ponerle de jugador de equipos especiales y poco más. Me la soplan estos comentarios, Elmore consiguió 11.5 sacks la temporada pasada y esto al fin y al cabo es lo que cuenta. Y si alguien pone la excusa que es que tenía a Brooks Reed en el otro lado y por eso tenía ventaja, en los Packers tendrá más ventaja porque con un poco de suerte jugará al otro lado de Clay Matthews. Sólo con que haga la mitad de lo que han hecho la retahila de patanes que han pasado por ese puesto esta temporada, los Packers habrán hecho una elección excepcional.
#168 – Minnesota Vikings (de Denver via Cleveland)
DeMarcus Love (OT, Arkansas)
Hay que partir de la base de que es complicado de creer que un tackle izquierdo llamado Love pueda triunfar en la NFL, pero si alguien puede hacerlo va a ser este jugador. Es un jugador algo lento pero bastante sólido, que ha jugado como titular cuatro años en una conferencia de nivel como la SEC y que ha tenido que jugar en distintas posiciones de la línea gracias a la habilidad de su entrenador Bobby Petrino de girar la línea de ataque cuando a él le salía de las pelotas. Y precisamente esto último puede ser algo que aprovechar en los Vikings, puesto que aunque no necesiten un reemplazo esta misma temporada, algunos de los miembros de la línea de ataque ya son mayores y no podrán disputar la cantidad de snaps que jugaban antes, y en esa rotación es donde puede entrar Love para empezar a formarse como jugador de la NFL.
#201 – San Diego Chargers
Stephen Schilling (OG, Michigan)
Este es el típico pick de San Diego que pasa completamente desapercibido pero que, dentro de un par de años, este tío aparecerá como de la nada y la gente se empezará a preguntarse de dónde salió. Y es que la línea de los Chargers siempre ha estado montada así, con jugadores elegidos en rondas tardías, jugadores que no los conocen ni en su casa pero que después de trabajar en la sombra un par de años salen al campo totalmente preparados para jugar. Ahora mismo Schilling no atrae la atención de nadie, es un prospecto que no hace nada explícitamente mal pero que tampoco es extraordinario en ninguna faceta del juego, pero no me cabe ninguna duda de que los Chargers lo sabrán aprovechar, no sería la primera vez que hacen algo así.
5 picks que no me gustan
#181 – Oakland Raiders
Richard Gordon (TE, Miami FL)
Que a los Saints les sonó la flauta con Jimmy Graham no hay duda, pero tentar a la suerte otra vez pero con un prospecto mucho peor, pues sólo lo podían hacer los Raiders. Gordon no tiene ningún tipo de experiencia como titular, tiene un problema con un hombro y su bagaje total de la temporada pasada asciende a 6 recepciones para 30 yardas. Pero eso sí, es atléticamente muy bueno y promete mucho. Es una sexta ronda, es obvio que cada uno cree en lo que quiere, pero no hacía falta tirar el pick de forma tan explícita.
#180 – Baltimore Ravens (de St. Louis)
Tyrod Taylor (QB, Virginia Tech)
Pero a ver panda de alcornoques… Vamos a intentar mantener la entereza, señores de la gerencia de los Baltimore Ravens, ¿a alguno de ustedes le suena aunque vagamente el nombre de Troy Smith? Sí, es ese proyecto de quarterback que cogieron hará unos cuatro años y que les salió penoso porque nunca se adaptó ni a la línea ofensiva ni al estilo de juego de los Ravens. Pues Tyrod Taylor es lo mismo pero peor. Es cierto que se dice que ha mejorado su técnica de pase durante el último año, en la que la falta de backfield le obligó a ganar los partidos él solito; bien, también se decía lo mismo de Patrick White cuando salió de West Virginia. Que no, que el pick es nefasto y no hay por donde cogerlo.
#202 – New York Giants
Jacquian Williams (LB, South Florida)
Es que no sé ni qué decir de este pick. Williams es un jugador malo y no hay mucho más que decir. Claro que probablemente sólo lo van a usar en equipos especiales, y dada la poca profundidad en el cuerpo de linebackers quizá hasta vea algún snap algún día que su equipo vaya ganando de 40 puntos, pero aun así deberían haberse mirado un poco más el scouting report. Según dicen los análisis, porque realmente yo no le he visto jugar en la vida ni ganas, Williams es un jugador flojo físicamente, con muy pocos instintos y una colocación en el campo muy baja, con una técnica de placaje mediocre tirando largo,… Vamos, muy malo.
#191 – Philadelphia Eagles (de Baltimore)
Jason Kelce (OG, Cincinnati)
Vaya por delante que este no me parece un mal pick de por sí, Kelce no tiene porqué ser un mal jugador y de hecho ha levantado algunas comparativas con Tom Nalen (un poco flipadas, pero ahí están). El problema aquí es que Andy Reid tiene que tener la autoestima muy baja y por eso necesita que al menos el 50% de su equipo tenga la misma complexión física que él. Sólo así se explica que éste de Kelce sea el tercer pick que emplean los Eagles en draftear un offensive guard, una posición que a priori no parecía ni tan siquiera prioritaria para Philadelphia. Pick desperdiciado no por la calidad del jugador, sino porque es otro pick que se usa en algo irrelevante cuando se podría haber usado en fortalecer la secundaria, por ejemplo.
#186 – Green Bay Packers (de Philadelphia via Detroit y Denver)
DJ Smith (OLB, Appalachian State)
Muy buen prospecto viniendo de una universidad pequeña y que seguro que aportará en equipos especiales. A mí esto ya no me sirve porque los Packers están plagados de jugadores de este tipo y lo que aportan es mínimo. Además, Smith ni tan siquiera pega con una defensa 3-4, no es un buen pass-rusher y es lo suficientemente pequeñito como para que uno de sus puntos débiles más destacados es que es incapaz de ver el backfield rival desde su posición de linebacker. Si los Packers tenían pensado coger a Elmore igualmente, podrían haberle pillado ahora y ahorrarse este ridículo.
5 picks que aún no sé si me gustan o no
#187 – Tampa Bay Buccaneers (de Kansas City)
Allen Bradford (RB, USC)
Quizá esté bien el hecho de que Tampa Bay haya elegido un corredor, y probablemente más si es el caso de un corredor de tipo ágil como Bradford. Lo que rechina aquí un poco es el jugador en cuestión. Bradford es un jugador muy en el molde de los últimos corredores salidos de USC (Reggie Bush, Joe McKnight) pero viendo el relativo éxito de uno siendo un superprospecto y la nula participación del otro siendo un prospecto de tercera ronda, el hecho de que Bradford no haya sido elegido hasta la sexta ronda hace dudar mucho de lo que puede aportar a nivel NFL. De momento, no se espera que aporte más que retornar algún punt ocasional, ni tan siquiera que gane el puesto para ser el retornador titular.
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#174 – Miami Dolphins (de San Francisco via Green Bay)
Charles Clay (TE, Tulsa)
Charles Clay es un jugador muy raro, así que el éxito de este pick dependerá del rol que pueda ocupar en los Dolphins. Pese a que normalmente los playmakers son jugadores ágiles que pueden regatear a cualquiera, pero en Tulsa él con sus 6’3″ y sus 245 libras era quien marcaba las diferencias en ataque (con el permiso de Damaris Johnson). Suponía una amenaza desde el backfield, donde le daban buena parte de las carreras del equipo, y sus motions a la posición de TE representaban una amenaza constante de recepción. Pero esta gente cuesta de adaptar a la NFL y, aunque sea un jugador nacido para este deporte y con unas condiciones espectaculares, su éxito dependerá de como le vaya a usar su nuevo equipo.
#172 – Minnesota Vikings
Brandon Fusco (C, Slippery Rock)
Todo el mundo habla bastante bien de este prospecto, es un jugador con buena complexión física, con muy buen atleticismo y bastante bueno en la protección de pase. En una clase bastante floja a nivel de centers eso debería haber sido suficiente como para obtener un buen lugar en el draft, pero la procedencia del jugador mata cualquier ganas que que podía tener una franquícia de elegirle. Slippery Rock no inspira demasiada confianza a la hora de sacar jugadores a la NFL, de hecho Fusco era el primero salido de allí que era invitado en la Combine, así que aunque como prospecto de jugador pueda pintar bien la procedencia y la competencia que ha tenido en la D-III hacen que su aprovechamiento para los Vikings esté un poco en duda.
#189 – Denver Broncos (de New Orleans via New England)
Mike Mohamed (LB, California)
Aparentemente el pick parece bueno, la porosidad defensiva de los Broncos es casi una de sus señas de identidad en los últimos años, pero el pick de Mohamed es cuando menos raro. Raro porque es el tercer linebacker elegido por los Broncos, después de Von Miller y Nate Irving (a priori mucho mejores que él), y raro porque tampoco encaja exactamente en su cambio de sistema defensivo a 4-3. Aun así, es un jugador muy rápido, que por corpulencia y características hasta podría pasar por safety, y que de buen seguro sumará más que restará tanto en equipos especiales como en downs de carrera, aunque su posible aportación al equipo de momento debería que contemplarse como escasa.
#178 – Washington Redskins (de Houston)
Aldrick Robinson (WR, Southern Methodist)
Con Robinson pasa un poco lo mismo que con Mohamed, pero la escasez de receptores anterior al draft en los Redskins quizá lo convierta en un pick algo mejor que el anterior. El problema básico con Robinson es que en principio debería haber hecho una temporada de la hostia en la NCAA, aprovechando que SMU es un equipo extremadamente inclinado al pase, pero al final fue que su temporada sólo se puede calificar como buena. Pese a tener habilidades atléticas más que suficiente, eso le convierte inmediatamente en uno de esos jugadores a quienes se les cuelga el letrero de jugador de sistema. Sólo si Hankerson no logra superar sus problemas de drops y si Paul no logra superar sus problemas en general, Robinson tendrá la oportunidad de quitarse ese cartel y convertirse en un jugador útil para los Redskins.
Sleeper final
#185 – New York Giants
Greg Jones (LB, Michigan State)
Me sorprende muchísimo que Greg Jones haya salido en la sexta ronda. No es un jugador que destaque, no puede cambiar un partido por sí solo y tampoco destaca en labores de liderazgo sobre el campo, pero según mi entender es, junto con Mason Foster, el mejor linebacker contra la carrera de toda la draft class. Tiene una habilidad especial para localizar al portador del balón y llegar a él antes que nadie, sus más de 100 placajes en las últimas tres temporadas confirman este extremo, y no tiene problemas en encargarse del trabajo sucio para que otros se lleven la fama. Y a todo esto hay que sumarle el hecho de que los linebackers de los Giants son malos del cagar con lo que, a poco que convenza a Coughlin, Jones se puede convertir bastante pronto en titular en la defensa de New York.