Desde hace un tiempo cada partido de béisbol se ha convertido en un evento para el que se necesita, según el caso, tener toda la tarde libre o no tener que madrugar al día siguiente. Más de tres horas de duración de media, concretamente, las 3 horas y 8 minutos de este año, lo ponen complicado a los que no son aficionados para que se interesen por este deporte. La MLB es consciente y se lo ha tomado en serio. La dirección de las Grandes Ligas teme perder público con juegos que se hacen eternos y quiere tomar medidas de cara a la próxima temporada.
Existe un consenso más o menos mayoritario sobre este tema. Los 30 equipos de la liga ya expusieron al comisionado entrante Rob Manfred (elegido en agosto para sustituir a Bud Selig a partir de enero de 2015) que se trabajara en este aspecto para que el béisbol no pierda interés a largo plazo.
La MLB ha anunciado una serie de medidas que empezarán a probarse en la Arizona Fall League. En palabras del comisionado Bud Selig:¨no pretenden ser grandes cambios, aunque sí significativos¨. Tras la reunión del llamado ‘Pace of Game Committee’, creado con la finalidad de acortar la media de duración de los partidos, se han hecho públicos algunos de los cambios que podrían producirse después de pasar el test de la Arizona Fall League.
- La primera hace referencia a los bateadores. La nueva norma obligará a mantener al menos un pie en la caja de bateo durante el turno de bateo, aunque con algunas excepciones, como un wild pitch o situaciones como al lanzar una foul, entre otras, además de cuando el bateador pida tiempo.
- También se quiere agilizar el trámite de la base por bolas intencionada. En este caso el pitcher no hará los cuatro lanzamientos, si no que con el gesto del entrenador al árbitro del home plate será suficiente para que el jugador pase automáticamente a primera base.
- Entre una entrada y otra el tiempo máximo será de 2 minutos y 5 segundos, aunque el bateador debe estar en la caja antes de 1 minuto y 45 segundos. La penalización si el bateador no está listo al cumplirse el tiempo se castigará con un strike. Si es el pitcher el que se retrasa el árbitro lo contará como bola. Del mismo modo se limita a dos minutos y medio el cambio de pitcher, que empezarán a contar desde que el sustituto pise el terreno de juego. También se limitan los tiempos a tres por equipo, incluyendo en su caso las entradas extra.
- El reloj aparecerá en la Arizona Fall League, aunque sólo en los partidos que se jueguen en el Salt Rivers Field. Servirá para hacer cumplir una modificación de la regla 8.04, que está en la reglas de la MLB, aunque nunca se aplica. En el reglamento, se fija el tiempo máximo de 12 segundos para que el pitcher haga el lanzamiento una vez recibe la bola, siempre que no haya ningún jugador en base. Pues bien, en los partidos del Salt Rivers Field se probará una norma similar, aunque con 20 segundos en lugar de 12. El pitcher tendrá esos 20 segundos para lanzar, de lo contrario será penalizado con un bola. Para este propósito, habrá dos relojes, cada uno en un banquillo. A este respecto, Bud Selig declaró que una de las cosas que hacen grande al béisbol no es un reloj, por lo que en principio los más puristas pueden estar tranquilos.
Estas medidas pueden ser potencialmente aplicables la temporada 2015, aunque está por ver que cumplan los objetivos que se proponen (como el de ganar atención entre los jóvenes) sin perder la esencia de este deporte. También se verá si el mayor ritmo pasará factura a los pitchers, al no tener tanto tiempo de descanso entre lanzamientos y se verán así más bateos.