Al buscar en el diccionario de la Real Academia Española la palabra «extinguir» nos dice en una de sus definiciones: «Hacer que cesen o se acaben del todo ciertas cosas que desaparecen gradualmente». Sin duda, esta descripción puede ser tomada para el catcher zurdo defensivo. El 18 de agosto se cumplió el aniversario número 27 desde que el último left-handed catcher vio acción en la mejor liga de béisbol del mundo. En los 140 años historia de Major League Baseball, solo 30 jugadores que lanzan con la mano izquierda se posicionaron detrás de home plate. ¿Por qué tan pocos? ¿Dificultades a la defensiva? ¿Quiénes fueron en contra de la tradición del receptor derecho?.
Los que rompieron el paradigma del catcher derecho
Hoy, en el siglo XXI, es utópico imaginarse en Grandes Ligas a un catcher con un guante en su mano derecha y lanzar la bola con su mano izquierda al pitcher, pero a finales del siglo XIX no era tan extraño, de hecho durante esa época del béisbol se vieron la mayoría de los left-handed catchers. El primero fue Fergy Malone en 1871 jugando para los Philadelphia Athletics.
Jack Clements es sin dudas el left-handed thorwing catcher mas conocido en la historia de MLB. Debutó en los Philadelphia Keystones de la Union Association en 1884, en 17 años de carrera profesional vistió la camiseta de Phillies y Saint Louis Browns entre otros, y su última temporada en las mayores fue en 1900 con los Boston Beavers. Con más de 1.000 partidos detrás del plato es el «padre» de los catchers zurdos.
Clements fue mucho más que un «freak» por ser zurdo y catcher en sus 17 años de carrera, fue un prolífico bateador para su época; terminó con un batting average de .287, 77 HR y 687 RBI. A la defensiva tampoco desentonaba ya que retiró al 32% de los corredores que intentaron robarle bases.
Sam Trott, Bill Hardrigbe, Tate Pop, Sy Sutcliffe y el ya mencionado Fergy Malone fueron otros left-handed catchers contemporáneos a Jack Clements y se encuentran en el club selecto por haber participado en 100 o más partidos como receptores en MLB.
Desde 1901 a la fecha ya no hubo receptores zurdos a la defensiva de manera regular en MLB, algunos jugadores fueron circunstancialmente utilizados por sus equipos, como por ejemplo en 1958 Dale Long vio acción por dos entradas detrás del plato para los Cubs, y en 1980 Mike Squires para los White Sox.
Benny Distefano, el último exponente
Distefano fue un jugador de banca e irregular del equipo de Pittsburgh, con constantes viajes entre las ligas menores menores y la Gran Carpa. Al final de la temporada 1988, y por expreso pedido de los Pirates, comenzó a tomar lecciones para estar detrás del plato, además fue enviado a las ligas de instrucción de la organización para ser el «catcher de emergencia» del club.
La temporada 1989 vio a Distefano en el Opening Day roster y listado como reserva en las posiciones: 1B/Oufielder/Catcher. El 18 de agosto de 1989, los Pirates enfrentaron a los Atlanta Braves en el Fulton County Stadium; Jim Leyland, por aquella época manager del equipo de Pittsburgh, en la parte alta de la sexta entrada y con su equipo abajo 9 a 4, lo utilizó como pinch-hitter en el turno de bateo que le correspondía a su catcher titular (Junior Ortiz), para cerrar el capítulo. Distefano tomó el lugar de Ortiz en la receptoría, transformándose en el último receptor zurdo a la defensiva en ver acción en un encuentro en MLB.
Nobody has caught a @MLB game left-handed since @Pirates Benny Distefano in 1989. pic.twitter.com/ZMLgj1prdu
— Baseball Photos (@Baseball_Photos) 14 de marzo de 2015
Un caso similar a Distefano pasó en 2013, el utility man zurdo Logan Schafer, que por aquel momento vestía el uniforme de los Milwaukee Brewers, fue designado como tercer catcher por su manager Ron Roenicke como contingencia en caso de que los dos receptores con los que contaba en el roster de 25 sufrieran algún problema y debieran dejar el juego en el mismo partido; lamentablemente no vio acción como receptor sustituto.
Las dificultades del catcher zurdo, ¿verdad o mito?
El 15% de la población mundial es zurda. En MLB, el 25% de los jugadores son zurdos. No hay reglas escritas en el béisbol que indiquen que puestos deben ocupar los peloteros dependiendo si son derechos o izquierdos, pero implícitamente sabemos que los jugadores que lanzan la bola con la mano izquierda están destinados a primera base, el outfield o lanzadores.
Nada prohíbe que un pelotero que lance con la mano izquierda pueda desempeñarse como catcher en el béisbol, pero la creencia que un derecho tiene ventaja sobre un zurdo pesa muchísimo al momento de solo considerar a un jugador «no diestro» en la receptoria. El principal argumento es que al ser la mayoría de los bateadores derechos o switch-hitters, se paran del lado izquierdo del cajón de bateo.
Scouts, coaches y periodistas consideran que los left-handed catchers otorgan un handicap defensivo, ya que las milésimas de segundo extras que utilizarían para ajustar su cuerpo para realizar un tiro a una base o al recibir un tiro en el home plate, pueden de ser la diferencia entre safe o out y a su vez definir un partido.
Las desventajas de un zurdo detrás del plato
- El tiro a 2B: A priori es la primera dificultad en la se piensa al imaginar a un zurdo detrás del plato y su dificultad para tirar la base intermedia con bateador derecho en la batters-box.
- El tag a un corredor en home plate: Ante una jugada en el plato, el receptor con el guante en su mano derecha siempre corre en desventaja ya que es el brazo que está más alejado al diamante, contrariamente a lo que pasa con los derechos. Para tratar de hacer out al corredor, deberá intentar tocarlo con el revés de su guante o tirarse de cabeza.
- El tiro a 3B (con un bateador derecho): Nuevamente el tiro hacia las almohadillas pone en aprieto al catcher ya que deberá deslizarse ligeramente hacia atrás y un costado para tener el campo visual óptimo y la oportunidad de tener un lanzamiento certero al tercer cojín en caso de que un corredor quiera estafarse la base.
Las ventajas de un zurdo detrás del plato
- Mejor fildeo de los bunts: Pueden atacar de manera más agresiva los toques de pelota cerca del home plate, ya que al ser la izquierda su mano hábil, les favorece: el posicionamiento del cuerpo, el footwork y el lanzamiento al primer cojín.
- El pitch framing: La posibilidad de «pintar» la zona de strike a los umpires cuando reciben lanzamientos quebrados «malos» de un pitcher derecho, lo que representa una ventaja importante.
- El tiro a 1B: Si el tiro a 3B con un bateador derecho es un punto débil para un catcher zurdo, lo opuesto un tiro a 1B tratando de «atrapar» a un corredor y un bateador derecho en el plato se convierte en una fortaleza.
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Solo en Little League y High School
Hoy en día solo en categorías formativas como son Tee Ball, Little League Baseball y hasta inclusive en High School se pueden encontrar algunos zurdos detrás del plato, pero que juegan en otras posiciones también (es de práctica habitual en las pequeñas ligas).
Lamentablemente, la figura del catcher zurdo muere en el colegio secundario. ¿Por qué digo ésto? Porque al finalizar esa etapa educativa los peloteros ya son prospects, ya sea para college o para el Draft de MLB, y a partir de éstos niveles de competencia los catchers zurdos no existen, por lo que los jugadores terminan decantándose alguna de las demás posiciones que juegan para seguir su carrera en el deporte tal como hicieron Sandy Koufax, Terry Mulholland y Zach Duke. Todos fueron catchers en Little Leagues, y con el pasar de los años y en su maduración deportiva eligieron la lomita en lugar del home plate.
El costo de oportunidad de tener a un left-handed catcher detrás del plato el cual es suficientemente bueno en su posición es usarlo como pitcher. Si tienes un zurdo con un brazo fuerte, en un mundo donde los lanzadores zurdos son extremadamente escasos, probablemente será usado para lanzarle al catcher y no al revés –J.C. Bradbury en el libro The Baseball Economist.
Finalmente, ¿catchers zurdos a la defensiva, nunca más en MLB?. Los receptores zurdos en MLB son casi un recuerdo de color y forman parte de la rica historia de las Grandes Ligas; si ya pasaron 27 años desde que el último left-handed catcher, ¿cuantos años más debemos esperar para el próximo? ¿Volveremos a ver uno alguna vez? Difícil predecirlo, sobre todo por la tradición del catcher derecho tan arraigada, agregado a la dinámica y especialización del juego, veo muy poco probable la inclusión de un receptor zurdo en un lineup de Major League Baseball en los años que vendrán del deporte. Pero nunca digamos «nunca más», porque la vida (y el béisbol) dan mil vueltas.